Sacerdotes no participaron en robo del Santuario de Copacabana

El resultado de la investigación realizada por la Fiscalía establece que "no existe responsabilidad alguna en los religiosos católicos y que no existen suficientes elementos de prueba para enjuiciar a los otros procesados", indicó la CEB en un comunicado.

El robo fue perpetrado en abril de 2013 cuando desaparecieron las joyas de la imagen principal de la Virgen de Copacabana del santuario situado en la localidad del mismo nombre, en el ribera del Lago Titicaca y cerca de la frontera con Perú.

Los ladrones sustrajeron 18 joyas de la Virgen y el niño Jesús del templo, de un valor incalculable para la Iglesia católica, lo que provocó una indignación generalizada debido a que se trata de una de las imágenes más veneradas por los católicos bolivianos.

La policía detuvo a varios religiosos del templo para tratar de aclarar este caso y en medio del revuelo el presidente Evo Morales llegó a acusar sin pruebas a "algunos obispos" de estar supuestamente implicados en una serie de robos cometidos contra varios templos y pidió a la CEB castigos severos contra ellos.

La Conferencia Episcopal denunció hoy que presiones sociales en Copacabana afectaron las primeras investigaciones dejando a las autoridades sin posibilidad de dar con los ladrones y provocaron que los agentes vayan casi exclusivamente en contra los religiosos.

"Se han afectado derechos fundamentales de personas que siendo inocentes han sido perseguidas, calumniadas constantemente en los medios de comunicación local, detenidas y cauteladas injustamente, con un daño moral irreversible", indica la CEB.

Los robos del patrimonio religioso en los templos de Bolivia han sido constantes en los últimos años, sin que se haya dado hasta ahora con indicios de quienes perpetraron los saqueos. EFE