Por: Redacción • Bolivia.com

Las abejas bolivianas, en peligro

Algunos pesticidas están arrasando con esta especie

Actualización
Las abejas se encuentran en riesgo por los químicos de los plaguicidas. Foto: Shutterstock
Las abejas se encuentran en riesgo por los químicos de los plaguicidas. Foto: Shutterstock

Algunos pesticidas están arrasando con esta especie

Las sustancias utilizadas para combatir las plagas de los campos de coca en Bolivia están amenazando la supervivencia de las abejas en el país. Así lo han dado a conocer representantes del gremio apicultor que además agregan que el inconveniente se ha potenciado debido al cambio climático y otros factores.

“Los cocales están usando de manera masiva e intensiva pesticidas químicos que afectan directamente a la salud de las abejas”, explicó Rene Villca, apicultor de Coroico, en la región de Nor Yungas, al norte de La Paz.  “De las 20 colmenas que tengo, diez están produciendo de manera normal y diez no. Obviamente tienen población, pero tienen mucha menos”, agregó.

Gran cantidad de abejas han desaparecido en los últimos meses. Foto: Shutterstock
Gran cantidad de abejas han desaparecido en los últimos meses. Foto: Shutterstock

Y es que las cifras hablan por sí solas. De acuerdo a un informe presentado por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Crimen (UNODC)  y el Gobierno de Bolivia, aumentó un 6% la siembra de coca incrementando de 23.100 hectáreas a 24.500 en 2017.

 “El área de cultivo de coca se ha expandido y el bosque nativo se ha reducido a niveles alarmantes”, informó Miguel Limachi, entomólogo de la Universidad Mayor de San Andrés de La Paz.

La situación también es problemática para otra clase de cultivos, que resultan afectados por la siembra de coca, siendo, irónicamente, las plantaciones que pueden ayudar a regular el nivel de plagas que afecta a los planteamientos de coca.

Los peligros de los pesticidas

Además de proteger los cultivos de coca, los pesticidas también se utilizan para prevenir las plagas en siembras de café o frutas tropicales. Las principales amenazas de esta clase de cultivos son una polilla muy pequeña diversas clases de hongos.

Los químicos utilizados para controlar la plaga están derivados del ácido fosfórico, una sustancia altamente tóxica tanto para las abejas como para los seres humanos. En los insectos las consecuencias son irreversibles ya que afecta directamente sus aptitudes motoras, afectando su sistema nervioso central. “Como son insectos sociales y extremadamente organizados, al verse afectado su sistema nervioso, su conducta cambia a patrones irregulares de comportamiento que causan un doble gasto de energía y desorganización en la colonia”, indicó Miguel Limachi.

Los plaguicidas usados afectan a abejas, otros cultivos y seres humanos. Foto: Shutterstock
Los plaguicidas usados afectan a abejas, otros cultivos y seres humanos. Foto: Shutterstock

Pero aparte de los pesticidas, son muchos los factores que están mermando la población de abejas en el territorio boliviano: “La contaminación electromagnética: emisión de ondas de celulares, microondas, radios, televisión […] afectan a su comunicación y al funcionamiento de la colmena porque interrumpen procesos como recolección de alimento, cuidado de las larvas o el aseo de la colonia”, explica Limachi.

En los humanos puede traer consecuencias similares, más al entrar en contacto con la tierra y los demás cultivos. Claramente quienes se ven más perjudicados son los cultivadores, al estar tanto tiempo en contacto directo con el químico.

Sin embargo, los trabajadores son conscientes de lo perjudicial que pueden llegar a ser esta clase de plaguicidas. Para realizar este trabajo cuentan únicamente con paños con los que se cubren la cara al esparcir el químico, ya que priorizan el buen estado de las plantaciones de coca que, en muchos casos, son su única fuente de ingreso.

“Utilizamos los pesticidas para las plagas porque las plagas se comen la coca en pedacitos, y esto afecta a nuestra economía. Hasta las plantas se pueden resecar, y de esa forma nosotros perdemos, como productores de coca, económicamente”, afirma Exalto Mamani, trabajador cocalero.

Muchas familias no tiene otro sustento aparte del cultivo de coca. Foto: Shutterstock
Muchas familias no tiene otro sustento aparte del cultivo de coca. Foto: Shutterstock

“Muchos de los productores de coca somos conscientes de que estamos afectando con estos productos químicos al medio ambiente, pero no nos queda otra alternativa porque la coquita nos mantiene y nos da la economía para mantener nuestra familia”, añadió Mamani.