Presidente de diputados exige que no haya obispos extranjeros en Bolivia

El presidente de la Cámara de Diputados de Bolivia, Marcelo Elío, exigió a la iglesia católica que todos los obispos del país sean bolivianos y afirmó que "no tendría por qué haber obispos extranjeros en ninguna parte del país".

Marcelo Elio Chávez, presidente de la Cámara de Diputados. Foto: ABI
Marcelo Elio Chávez, presidente de la Cámara de Diputados. Foto: ABI

El presidente de la Cámara de Diputados de Bolivia, Marcelo Elío, exigió a la iglesia católica que todos los obispos del país sean bolivianos y afirmó que "no tendría por qué haber obispos extranjeros en ninguna parte del país".

"Como ciudadano boliviano, como diputado electo, yo exigiría a la iglesia católica que todos los obispos en territorio boliviano sean nacionales, sean bolivianos, no tendrían por qué haber obispos extranjero en ninguna parte del país", espetó Elío, según un reporte de radio Erbol.

El legislador agregó que "no tendríamos por qué tener obispos extranjeros que vengan a imponer criterios absurdos".

Elío hizo estas manifestaciones un día después de que el secretario de la Conferencia Episcopal de Bolivia y obispo de El Alto, Eugenio Scarpellini, de origen italiano, manifestara su preocupación por el pago del doble aguinaldo decretado por el Gobierno, que pone en riesgo la obra social de la iglesia al suponer un importante desembolso económico.

Scarpellini advirtió en una rueda de prensa de que existe "un alto riesgo" de que algunas de las obras sociales de la iglesia "disminuyan fuertemente" su capacidad de atender a las personas necesitadas, al verse obligadas a reducir su personal por no poder hacer frente a los costes salariales impuestos por el Ejecutivo.

"Pedimos oficialmente poder dialogar con el Gobierno sobre este tema del doble aguinaldo y otros temas que nos preocupan y que son parte de la vida de nuestra sociedad", dijo el prelado.

Ante esta solicitud, Marcelo Elío recomendó este viernes a la iglesia que solicite el diálogo "como corresponde" y afirmó que "las puertas siempre van a estar abiertas par cualquier ciudadano, especialmente boliviano".

"La posición de los jerarcas tiene un tinte de oposición, eso está claro, ellos están tratando de sobreponerse incluso a la normativa boliviana y más bien deberían transparentar sus ingresos", concluyó el presidente de los diputados y dirigente del partido del presidente Evo Morales.

Las relaciones entre Morales y la iglesia católica boliviana han sido tensas desde que el mandatario llegó al poder en 2006 por las críticas que hacen los religiosos a su Gobierno en asuntos políticos, sociales y económicos.

En octubre pasado, tras ganar sus terceras elecciones consecutivas para un mandato hasta 2020, Morales aseguró que protestará con documentos ante el papa acerca de los jerarcas católicos en Bolivia porque, según él, le atacan en los medios de comunicación de la iglesia y le tratan como su primer "enemigo".

Morales se reunió en privado con el papa Francisco en El Vaticano a finales de octubre, aunque no trascendió el contenido de ese encuentro ni se supo si el gobernante trasladó al pontífice su malestar con la iglesia boliviana. EFE

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