Gonzales: Vimos cómo chilenos trataban de ocultar mal estado de Puerto de Arica

El presidente del senado hizo un sumario de los problemas que las autoridades bolivianas evidenciaron en puertos chilenos, supuestamente, al servicio de cargas bolivianas.

El presidente del senado, Luis Alberto Gonzales, brinda informe del viaje de autoridades bolivianas a puertos de Chile. Foto: ABI
El presidente del senado, Luis Alberto Gonzales, brinda informe del viaje de autoridades bolivianas a puertos de Chile. Foto: ABI

El presidente del senado hizo un sumario de los problemas que las autoridades bolivianas evidenciaron en puertos chilenos, supuestamente, al servicio de cargas bolivianas.

El presidente de la Cámara de Senadores, José Alberto Gonzales, informó que durante las 6 horas que la delegación boliviana pasó en una sala pequeña sin siquiera el más mínimo calor protocolar, en el puerto chileno de Arica, antes de seguir al de Antofagasta, pudo observar cómo funcionarios chilenos del Puerto de Arica trataron de ocultar el mal estado de esa terminal marítima.

"En esas seis horas, podemos dar fe de aquello, los funcionarios del Puerto corrieron para que el puerto luzca en mejores condiciones que en las que estaba cuando llegó la Comisión", dijo durante el informe público que brindó la comitiva al presidente Evo Morales, en Palacio de Gobierno.

La comitiva boliviana conformada al menos por 60 personas, de las que 12 son autoridades y el resto colaboradores, representantes del transporte y periodistas, viajó a Chile para verificar las denuncias de abusos y discriminación contra transportistas bolivianos del comercio internacional en los puertos de Arica y Antofagasta.

Gonzales relató que, cuando quedaron varados por al menos 6 horas, al ingreso de Arica, por una orden de la Cancillería chilena, según lo informó un funcionario de ese Puerto, observó que "de manera desenfrenada" los empleados portuarios trataban de tapar con plásticos la soya boliviana de exportación a la intemperie y sometida al estierco de la fauna del lugar.

"En algunos lugares lograron éxito, porque taparon y así seguramente van a dar fe las imágenes de los compañeros de la prensa, pero en otros no tuvieron la misma suerte", agregó.

Explicó que pese a los esfuerzos de los chilenos, verificaron que en algunos lugares los desechos de las gaviotas se juntaban a la soya en el piso y al sol.

Sin embargo cuando consultaron sobre la situación de la soya de depósito, dijeron que era para los chanchos.

"Pudimos ver cómo convivía la caca de las palomas (gaviotas) con la soya boliviana de exportación, y cuando preguntamos si esto era posible, él (un empleado portuario) decía no, esa soya es para los chanchos, los chanchos también comen caca", sostuvo.

Asimismo, dijo que vieron cómo arreglaban luminarias, "para poner en mejores condiciones el puerto, pero en muchos casos no lograron su cometido".

Gonzales recordó que desde que hicieron el recorrido por la ruta 11 internacional a Bolivia, en la carretera hacia Arica, verificaron el mal estado de la carretera, asimismo, reprochó la actitud que algunos funcionarios chilenos tuvieron para con la delegación boliviana.

Informó que ya en Chungará, el primer paso fronterizo de Chile, las autoridades bolivianas tuvieron que soportar que la Policía de Investigación, que cumple la función de Migración, revise sus maletas y vehículos, sin respetar que se trataba de una delegación oficial y que gozaba de facultad diplomática.

Una vez que pudieron continuar con su viaje, la travesía inició en Arica, donde les prohibieron el paso, porque la respuesta de los empleados del puerto fue que podrían ingresar sólo 30 personas de la delegación boliviana de 60 miembros.

La prohibición, se registró, llegó 15 minutos después de la llegada de la delegación bolivian al puerto de Arica y autorizaba el ingreso en 6 horas más, es decir  a las 15h00 chilenas de ese lunes.

Asimismo, relató que cuando se acomodaron en el autobús, que la administración del puerto les proporcionó, tuvo un impase con un funcionario, que incluso trató de hacerle callar, porque quería bajar a algunos periodistas bolivianos, para dar lugar a los chilenos.

Sin embargo, Gonzales le pidió respeto y le recordó al funcionario que el 80% de la carga que pasa por Arica era de Bolivia.

"Por tanto el 80% de su salario es pagado gracias al trabajo de los bolivianos", le subrayó al empleado.

"Debe ser respetuoso, porque debe saber que el 80% de la carga que pasa por acá es boliviana, por tanto el 80% de tu sueldo te lo pagan los bolivianos, eso dio pie a una serie de interpretaciones bastante mentirosas, de parte del canciller chileno, que no vale la pena comentar", explicó.

ABI