Dos regiones paran por pérdida de escaños parlamentarios

Líderes de Potosí y Beni ratificaron las huelgas ciudadanas en rechazo a una propuesta del Tribunal Supremo Electoral (TSE) que les resta un escaño en la Asamblea Legislativa.

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Líderes de Potosí y Beni ratificaron las huelgas ciudadanas en rechazo a una propuesta del Tribunal Supremo Electoral (TSE) que les resta un escaño en la Asamblea Legislativa.

Las organizaciones sociales, sindicatos y vecinos agrupados en el Comité Cívico de Potosí (Comcipo) acordaron paralizar actividades y bloquear las calles e ingresos a esa ciudad durante 24 horas, dijo a Efe por teléfono el secretario general de esa entidad, José Flores.

El departamento amazónico de Beni también para por el mismo motivo, señaló el diputado beniano Mezoth Shriqui, de la fuerza opositora Convergencia Nacional.

Ambas regiones rechazan una propuesta que el TSE presentó la semana pasada para cambiar la distribución de escaños en el Parlamento, porque ésta les quita un diputado, al igual que a Chuquisaca, para sumar tres a la oriental Santa Cruz, en función de los resultados del censo de población realizado en 2012.

Representantes del órgano electoral se reunieron hoy con las presidentas de las Cámaras alta y baja, las oficialistas Gabriela Montaño y Betty Tejada, respectivamente, para explicarles su propuesta para la redistribución parlamentaria.

Montaño opinó que la fórmula empleada por el TSE se adecúa a la Constitución boliviana y calificó como "medidas políticas" las huelgas en Potosí y Beni y otra convocada para el jueves en Chuquisaca, según un comunicado de prensa del Senado.

Los resultados del censo de 2012, presentados a fines de julio por el Gobierno, también han dejado insatisfechas y con dudas a La Paz y Santa Cruz, que ya protestaron en meses pasados, y a Cochabamba, que alista una huelga para el lunes 7.

Además de rechazar la redistribución de escaños parlamentarios, los potosinos también protestarán por demoras en proyectos de desarrollo prometidos por el Ejecutivo, entre ellos, una fábrica de cemento y un aeropuerto internacional, dijo Flores.

El dirigente recordó que en 2010, Potosí estuvo paralizada durante 19 días con estos mismos reclamos que, según dijo, no han sido atendidos por el Ejecutivo.

Cuatro ministros del presidente Evo Morales estuvieron ayer en Potosí pero no lograron convencer a estos sectores para que suspendan la huelga.

Según Flores, las autoridades se reunieron sólo con campesinos y mineros cooperativistas leales al Gobierno, además de trabajadores de la gobernación potosina, controlada por el oficialismo, sectores que han anunciado que no se unirán a la protesta.

Las autoridades bolivianas han negado que el Ejecutivo haya abandonado a Potosí, pues aseguran que la inversión estatal en esa región asciende a 1.900 millones de dólares en diversos proyectos estratégicos, como el desarrollo de la industria del litio.

También han expresado su preocupación ante la posibilidad de que la protesta dañe la imagen del país, a tres meses del paso del rally Dakar de 2014 por Potosí y la región andina de Oruro. EFE

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