¿Bolivia sabe cómo jugarle al poderoso Brasil de Neymar en La Paz?

Luego de tres décadas de triunfos como local ante Brasil, Bolivia dice saber cómo jugarle a los pentacampeones mundiales en La Paz. 

Su estrella Marcelo Martins Moreno sólo espera "un día iluminado" para darle alegría al pueblo boliviano, pese a que ya están fuera de Rusia-2018.

A pesar de disponer de ese 'know how', Martins, que comanda el ataque boliviano, está persuadido que el del jueves en el Hernando Siles habrá de ser "un partido muy difícil, un partido de mucha concentración en ambas selecciones".

Sigue aquí el partido EN VIVO de Bolivia vs. Brasil.

Aunque, "obviamente que nosotros sabemos cómo jugarle a Brasil aquí en La Paz y la intención que tenemos es meterle ritmo" al juego. 

La capital boliviana, a 3.600 m de altitud, es un desafío para atletas habituados a jugar al nivel del mar, por la menor presencia de oxígeno.

Precisamente, la verdeamarela perdió allí un invicto de cuatro décadas en eliminatorias, al caer 2-0 ante los locales en 1993.

Ante el poderío del equipo de Neymar, Martins espera que "estemos en un día iluminado para darle una alegría a la gente de Bolivia", que nuevamente se vio frustrada por la eliminación de su seleccionado al Mundial de Rusia-2018.

"Brasil viene con su equipo titular, seguramente vienen a querer hacer un partido limpio, a querer jugar muy bien como lo viene haciendo, con su entrenador que no ha perdido todavía", dijo el exGremio y exFlamengo brasileños.

"Me imagino que van a querer tocar el balón, a querer sorprendernos en el contraataque y nosotros tenemos que contrarrestar esos jugadores veloces que tienen, jugadores que te desequilibran en cualquier momento", razonó.

Bolivia está eliminada con apenas 13 puntos en 16 salidas, y fue penalizada con la pérdida de 4 puntos por alineación indebida de un jugador en el triunfo 1-0 ante Perú y el empate 0-0 con Chile. En esta ocasión firma una de sus peores actuaciones en el clasificatorio regional. 

Brasil, con 37 puntos, se anotó, en tanto, con antelación al ecuménico ruso.

AFP