Lavezzi y Schürrle, dos revulsivos pegados a la cal

Desatascar partidos es una de las misiones de Ezequiel Lavezzi y Andre Schürrle, revulsivos de Argentina y Alemania, respectivamente.

Ezequiel Lavezzi, extremo diestro del PSG francés y de la selección Argentina. Foto: EFE
Ezequiel Lavezzi, extremo diestro del PSG francés y de la selección Argentina. Foto: EFE

Desatascar partidos es una de las misiones de Ezequiel Lavezzi y Andre Schürrle, revulsivos de Argentina y Alemania, respectivamente.

Pegados a la cal y sacrificados por del equipo, ambos han contribuido a mejorar el rendimiento de sus selecciones en momentos clave del Mundial.

Lavezzi, extremo diestro del PSG francés, y Schürrle, extremo zurdo del Chelsea inglés, comenzaron la Copa como figurantes. Fuera del once inicial argentino y alemán, no tuvieron más remedio que aguardar su oportunidad.

La de Lavezzi sucedió por el infortunio de su colega Sergio 'Kun' Agüero. Un problema muscular le colocó fuera de las elecciones del seleccionador Alejandro Sabella. En el sudado triunfo ante Nigeria (2-3), entró en el 38. Desde aquel encuentro, siempre repitió como titular.

En los octavos contra Suiza disputó 74 minutos, hasta ser reemplazado por Rodrigo Palacio, y en los cuartos ante Bélgica, completó 71 minutos, cuando fue sustituido por el propio Palacio.

En esos dos encuentros, Argentina sufrió para vencer, en ambos casos 1-0, pero registró mejoras en el juego colectivo, sobre todo ante Bélgica.

En las semifinales frente a Holanda, 'el Pocho' Lavezzi, de 29 años, aportó algo que no se ve con mucha frecuencia en un futbolista ofensivo: sacrificio en defensa. Se apostó en el centro del campo como un volante más para cerrar las incursiones del holandés Arjen Robben.

Extenuado, dejó su lugar en la prórroga (minuto 101) por el veterano Maxi Rodríguez, autor del penalti decisivo que llegó a Argentina a la final del domingo contra Alemania.

Con 'el Kun' Agüero recuperado, a Sabella se le plantean dudas. No obstante, el sacrificio defensivo de 'el Pocho' podrá ser determinante frente a una selección de ataque como la alemana.

El rubio Schürrle, sin hacer mucho ruido, ha resultado fundamental para la Mannschaft. Nunca alineó de inicio, pero suma un constante goteo de 155 minutos en cinco encuentros, los más recordados los de Argelia.

Asfixiado por la presión magrebí, Joaquim Löw optó por el descaro, frescura y la rapidez de Schürrle, de 23 años.

En el intervalo, rindió a Mario Götze, aunque no fue hasta el inicio de la prórroga cuando se exhibió. Centro desde la izquierda de Thomas Müller y espectacular remate de primera de Schürrle, un toque de clase entre la espuela y el tacón.

Ese tanto abrió el camino de los cuartos para Alemania. En el triunfo ante Francia (1-0), el héroe rubicundo de Löw disputó unos 20 minutos y, en las semifinales contra Brasil, jugó media hora coronada con dos goles de ratón de área, los dos últimos del 1-7.

Ya suma tres, los mismos, por ejemplo, que Arjen Robben o Robin Van Persie y uno menos que Leo Messi o Neymar.

En la final del domingo, Lavezzi y Schürrle, dos de los figurantes más efectivos del Mundial, tendrán la oportunidad de demostrar de nuevo su valor en Maracaná, el templo del fútbol. Antonio Torres del Cerro. EFE

Artículos Relacionados

+ Artículos

Lo más leído en Fútbol

Lo más leído en Bolivia.com