Milenio prevé expansión de cooperativistas y reducción de la mediana y gran empresa minera

La favorable coyuntura para los minerales a nivel internacional a pesar de la disminución de los precios en el primer semestre del año, junto al levantamiento de la reserva fiscal minera en el país por parte del Gobierno, hace prever la expansión y crecimiento del sector cooperativista, a la vez de una disminución de la mediana y gran empresa, debido al clima de inseguridad jurídica y la falta de nuevas inversiones, afirma la Fundación Milenio. 

El economista José Luis Evia, coordinador técnico del Informe de Milenio sobre la Economía al primer trimestre de 2012, señala que lo que se verá es “que el sector cooperativista va crecer y la minería grande va caer porque no se verá inversiones, y por el otro lado se verá el agotamiento de las reservas de las explotaciones en curso”. 

En términos porcentuales dijo que es muy probable que se vea la expansión de la minería cooperativizada y chica, debido a que el Gobierno brindó mejores oportunidades al sector minero cooperativizado, lo que se refleja en el levantamiento de la reserva fiscal para las cooperativas, luego de una serie de conflictos en torno a la minería. 

El valor de la producción minera en porcentaje reflejó en 2011 un 42,2% concentrado en la minería grande, 31,6% en la minería mediana, y un 26,2% en la minería pequeña. Para 2012, la minería grande decreció al 36,8%, la minería mediana aumentó al 35,6% minería mediana, mientras que la minería chica aumentó al 27,6%. 

“Alrededor de 2007, el Gobierno declaró a todo el territorio como reserva fiscal, pero lo que se ha hecho con el Decreto Supremo (DS 1369) fue levantar la reserva fiscal para los cooperativistas. Obviamente eso, sumado a que van a explotar la mitad de la veta Rosario (de la mina Colquiri), tienen más ventajas”, sostiene. 

El DS 29117 de 2007 declaró reserva fiscal minera a todo el territorio nacional, incluyendo los recursos metálicos, evaporíticos, piedras preciosas y otras. Con el nuevo decreto, también se declara de uso exclusivo a favor de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol), 26 áreas mineras. 

“Hay que ver las condiciones para esto porque hay un problema de discriminación, porque hay empresas que deberían estar en el régimen general y no de cooperativas El régimen de cooperativas tiene ventajas porque está exenta de algunos impuestos, como el de utilidades porque tributan menos que las empresas formales. El grueso de los impuestos lo generan las grandes empresas”, sostiene. 

 

El estudio advierte que la gran depresión mundial también ha llegado a la minería boliviana, con una virulencia “inusitada”, al parecer para quedarse por un largo periodo de tiempo, lo que ha puesto en evidencia, una inédita vulnerabilidad competitiva de la minería boliviana. 

La caída de la producción y precios de minerales en Bolivia durante los dos primeros trimestres de 2012, acontece bajo una economía mundial agobiada por tendencias irrefrenables a la recesión, y luego de ocho años de subidas constantes de los precios de los minerales. 

“Si bajan los precios, claramente los más afectados serán los cooperativistas porque son explotaciones de baja tecnología y por tanto de baja productividad; hay un margen más pequeño, son mucho más vulnerables a la baja de los precios, y eso generará un problema social porque las cooperativas tienen entre 100 mil a 120 mil trabajadores lo que significa que más de medio millón de bolivianos depende de esta actividad”, afirma el investigador. 

Evia advierte que si el sector cooperativizado se ve afectado, el Gobierno podría enfrentar serios problemas sociales, no solo por tratarse de un sector muy numerosos, sino también organizado.