Un endeble cuadro uruguayo visitó La Paz. El partido parecía estar servido para Bolívar pero sus propios errores lo llevaron hasta los límites de la angustia. El mayor mérito del local fue recuperarse de 2 contrastes y terminar el encuentro con una goleada memorable.
Siete goles en la Copa Libertadores no es frecuente. Un score que siempre que se da, en cualquiera de sus combinaciones, resulta ser un regalo para los ojos de los amantes del noble deporte.
Peñarol planteó mal el partido y Bolívar tuvo grandes lagunas, pero a quién puede importarle que este encuentro hubiera mostrado pasajes de juego lento e impreciso, si al final vio 7 goles y algunos de ellos, de gran factura.
Botero, Guiberguis y Sánchez fueron hombres desequilibrantes y en ellos basó su éxito el equipo celeste. En Peñarol, la tarea del primer tiempo de Emanuelle sobresalió sobre el resto de la de sus compañeros. Dos desbordes
suyos terminaron en goles de Rotundo y Bueno a los 17 y 21 minutos, respectivamente.
Bolívar pareció sentir los varios cambios tácticos y técnicos que introdujo Vladimir Soria en este partido. El sistema 4-4-2 hizo aguas en el fondo. Sandy y Sánchez parecieron tener problemas de distancia y Pizarro fue un permanente corto circuito en la salida bolivarista; y como si fuera poco, a estos problemas se sumó el trabajo intermitente de Limberg Gutiérrez. Así las cosas, Bolívar volvía a convertirse en un cuadro “Botero dependiente”.
Tres muestras de esa “Botero dependencia” fueron los tres goles celestes del primer tiempo El gran goleador convirtió de cabeza a los 7 y 39 minutos y puso a los 43 el pase gol para que Gutiérrez convierta el mejor gol de la noche, tras hacerle un sombrero al golero Eldoayén.
La segunda parte del partido fue enteramente para el local. Bolívar convirtió 2 goles adicionales y con ellos sumó 5, pero
pudo haber hecho 2 ó 3 más y a nadie le hubiera extrañado.
En la segunda etapa sobresalió el juego de Pedro Guiberguis que manejó los hilos celestes, hizo pases milimétricos, pisó el balón, hizo la pausa y marcó el ritmo del campeón boliviano. Al terminar el encuentro, el DT gualdinegro, Diego Aguirre reconoció que el Bolívar, en el balance final, fue muy superior a su equipo.
Bolívar despertó a su hinchada recién cuando el marcador estaba 4-2. Sus jugadores terminaron ovacionados, pero largos pasajes del encuentro recibieron el duro silencio de las tribunas. La Academia deberá mejorar su producción si pretende ser protagonista en el torneo. Pero que no quepa duda que esta noche fue el mejor de los 2 equipos que se enfrentaron en el Hernando Siles, que ganó, goleó y puso de rodillas al legendario Peñarol.
BOLIVAR (5):
1 José Carlo FERNANDEZ, 7 Luis Gatty RIBEIRO, 3 Marco SANDY, 6 Oscar SANCHEZ, 11 Percy COLQUE, 2 Limbert
PIZARRO, 8 Rubén TUFIÑO, 10 Pedro GUIBERGUIS, 18 Limberg GUTIERREZ, 24 Gonzalo GALINDO, 9 Joaquín BOTERO
ALTERNO: 19 Líder PAZ
SUPLENTES:12 Mauro MACHADO, 4 Leandro WEBER, 5 Martín LIGORI, 13 Leando CABRERA, , 20 Miguel MERCADO, 21 Roberto GALINDO
PEÑAROL (2):
1 Federico ELDUAYEN, 2 Leonel PILIPAUSKAS, 22 Joe BIZERA, 6 Marcelo DA SOUZA, 19 Fernando FAJARDO, 14 Nicolás ROTUNDO, 15 Fabián CESARO, 8 Antonio PACHECO, 7 Diego EMANUELLE, 18 Gabriel CEDRES, 20 Carlos BUENO
ALTERNARON: 11 Fabián ESTOYANOFF, 10 Pablo BENGOECHEA y 24 Sergio LEAL
SUPLENTES: 12 Adrian BERBIA, 4 Joe HERRERA, 13 Mariano BOGGIACHINO, 3 Luis NUÑEZ
GOLES: Joaquin Botero 8', 39' Y 79', Limbert Gutierrez 43', Marco Antonio Sandy 82' (Bolívar) Nicolas Rotundo 17' , Carlos Bueno 20' (Peñarol)
ARBITRO: Daniel Jimenez (Arg) Asistentes: Fabián Modorran (Arg) y Gilberto Tadeo (Arg)
PUBLICO: 18.371 espectadores RECAUDACION: 521.680 bolivianos
