El avión de Air France que se incendió el martes después de salirse de la pista de aterrizaje en el aeropuerto canadiense de Toronto fue totalmente evacuado en menos de dos minutos, informaron ayer fuentes oficiales.
Los equipos de rescate del aeropuerto tardaron menos de un minuto en llegar al lugar donde ardía el avión Airbus 340 que cubría el vuelo 358 de la aerolínea francesa. Para entonces, más de tres cuartas partes de los 309 ocupantes del avión ya habían salido por sus propios medios y la evacuación total se produjo en menos de dos minutos.
Don Enns, portavoz del
Consejo de Seguridad del Transporte canadiense (TSB) encargado de la investigación de las causas del accidente, indicó ayer que se van a analizar varias de las probables razones por las que se produjo el accidente, entre ellas las condiciones meteorológicas.
El avión, que procedía de la capital francesa con 309 personas a bordo, se salió de la pista el martes alrededor de las 20.00 GMT tras aterrizar en medio de una intensa lluvia torrencial acompañada de granizo y relámpagos.
El avión terminó con la parte delantera hundida en un hondonada a unos 200 metros al final
de la pista de aterrizaje y tan pronto como se detuvo comenzó a arder. A pesar de la espectacularidad del hecho, los 297 pasajeros y 12 tripulantes dejaron el avión en segundos y sólo 43 personas resultaron heridas leves.
El jefe de bomberos del aeropuerto de Toronto, Mile Figliola, explicó que los equipos de rescate llegaron al lugar del accidente en 52 segundos y fueron capaces de ayudar a evacuar el avión antes de que las llamas bloqueasen las salidas de emergencia.
Uno de los principales objetivos de los investigadores es la recuperación de las dos “cajas negras”
del avión. Una de las grabadoras recopila las lecturas de numerosos instrumentos del aparato (velocidad, movimientos del timón y otras superficies de control, datos sobre el funcionamiento de equipos, etc.), información vital para saber si algún equipo no funcionó correctamente.
La segunda “caja negra” graba las conversaciones mantenidas por los dos pilotos, lo que revelará lo que uno y otro decían antes y durante el accidente. A primeras horas de la mañana de ayer los restos del avión estaban aún demasiado calientes como para proceder a la recuperación de las cajas.
