Bolivia no condena ni apoya las acciones de Rusia en Ucrania, absteniéndose de votar en sesión de la ONU

En una nueva sesión convocada por las Naciones Unidas este jueves, México y Francia tocaron el tema de "Consecuiencias humanitarias de la agresión", tópico de debate respecto a los conflictos que siguen en pie en Ucrania entre dicho país y Rusia.

Se abrió la votación para un "Inmediato cese de hostilidades en Ucrania" y de 183 países que contaban con sus representantes en el foro, 140 estuvieron a favor y otros 38 se abstuvieron de señalar una postura al respecto con su voto, y sólo cinco votaron en contra. 

Bolivia se encuentra entre los países que se abstuvieron de opinar, una vez más. Representantes de Sudamérica que optaron por abstenerse igual, fueron Cuba, El Salvador y Nicaragua: siendo que Bolivia sigue sin asumir una postura a nivel internacional en tres ocasiones. Venezuela no pudo emitir un voto, y esto es por la deuda que tiene el país y por tanto, su derecho a voto ha sido removido.

Este escenario, le ha generado críticas a la representación boliviana y al presidente, que desde el inicio de los conflictos bélicos en el este europeo, no ha asumido una postura oficial respecto a la situación que ya tiene más de un mes de haber iniciado.

El texto de la resolución a la que se llegó en la sesión de las NNUU refiere la condena de “todas las violaciones del derecho humanitario internacional”, en alusión al desplazamiento de refugiados a los países vecinos que ya supera los 2 millones y no para de suceder, ya que los ataques rusos y enfrentamientos entre ambos países persisten.

Asimismo, hace un llamado para que el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, emita una petición directa a Rusia a fin de que “retire inmediata, completa e incondicionalmente”, todo su despliegue militar de tierras ucranianas.

Ahora, en esta última resolución, China, India e Irán también se sumaron a los países que no votan en favor o en contra de una resolución de NNUU, cuando antes daban su apoyo a Rusia y por otro lado, Moscú  logró el apoyo de Siria, Bielorrusia, Corea del Norte y Eritrea que votaron en contra de la resolución de condena.