Evo Morales acusa a medios católicos

"Medios de comunicación de la Iglesia Católica continúan como en el tiempo de la colonia. Hoy humillan al presidente indígena", escribió Evo Morales en su cuenta en Twitter.

Agregó que "Jesucristo nos enseñó a ser pacientes y a soportar todo, por los pobres y los humildes".

Morales pareció aludir a la red de emisoras Erbol y a la Agencia de Noticias Fides (ANF), ambas dependientes de la Iglesia católica, a las que su ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, ha acusado de ser parte de un "cártel" de medios que supuestamente mintieron sobre el caso que involucra a una exnovia del gobernante.

Quintana ha acusado a esos medios, a los diarios Página Siete y El Deber y a algunos periodistas de conspirar junto a opositores y a la Embajada de EE.UU. para desestabilizar al Gobierno supuestamente usando el caso de tráfico de influencias a favor de la empresa china Camce, en la que trabajó la expareja de Morales Gabriela Zapata.

El ministro basó su acusación en las noticias difundidas por estos medios y por los periodistas sobre la relación de Zapata y Morales, la polémica sobre un hijo que tuvieron en 2007 y la denuncia del supuesto tráfico de influencias a favor de Camce, si bien estos temas también fueron reportados por casi toda la prensa local.

En el caso concreto de Erbol y ANF, Quintana pidió al Parlamento, de mayoría oficialista, que investigue si la Iglesia católica está detrás de los "ataques" de esos medios hacia el Gobierno.

Las asociaciones de periodistas y medios han rechazado las denuncias del ministro y exigieron al Ejecutivo respeto por el trabajo periodístico.

El "caso Zapata" fue denunciado por el periodista Carlos Valverde, quien hace unos días reconoció que había obtenido nueva información según la cual el niño nunca existió.

Las nuevas afirmaciones de Valverde sirvieron a Morales y a sus seguidores para asegurar que ganó "la mentira" en el referendo del pasado 21 de febrero, en el que se sometió a consulta una iniciativa oficialista para reformar la Constitución y permitir que el gobernante vuelva a postular en las elecciones de 2019.

Con ese argumento, sindicatos de obreros y campesinos afines al mandatario han comenzado a plantear la anulación de la consulta de febrero, en la que el No a la reforma ganó con un 51,30 % frente al Sí, que sumó un 48,70 %, y a pedir que se repita la votación. EFE