Una cadete de Anapol muere y 3 permanecen heridas por supuesta violencia

Se trata de la cadete Cinthia Poma Gutiérrez, de 24 años, que murió por una "crisis asmática secundaria" ocasionada "por un esfuerzo físico que habría realizado", dijo a los medios el jefe de la División de Homicidios de la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen (FELCC) de La Paz, mayor Walter Sosa.

Ese fue el reporte preliminar que recibió la FELCC de la clínica policial Virgen de Copacabana, a donde fue llevada Poma para recibir atención médica.

Según Sosa, los cadetes se encontraban realizando "alguna actividad física" en la Anapol, cuando Poma se desvaneció.

"Ella ha sido trasladada en primera instancia a Sanidad de la Academia de Policías y luego al hospital Virgen de Copacabana para que reciba las atenciones primarias", señaló Sosa.

Según informes médicos, Poma llegó en estado de coma a la clínica e intentaron reanimarla sin éxito.

Otras tres cadetes fueron internadas en el mismo hospital, dos por insuficiencias respiratorias y una tercera lesionada por un golpe en la espalda baja.

Una de las policías ya ha sido dada de alta, mientras que las dos restantes -una está en terapia intensiva- "se recuperan favorablemente", informó el Ministerio de Gobierno en un comunicado.

Los familiares de Poma y de las cadetes heridas han denunciado a los medios que el grupo de estudiantes al que pertenecían las muchachas fue sometido el lunes por la tarde a castigos físicos por parte de sus superiores, que incluyeron hacerles trotar por el patio de la Anapol en medio de gases lacrimógenos.

El Ministerio de Gobierno, del que depende la Policía, lamentó la muerte de Cinthia Poma e instruyó "la remisión del caso a la justicia ordinaria para establecer las sanciones penales correspondientes contra él, la o los autores del hecho".

"Esta Cartera de Estado solicitó a las autoridades de la Universidad Policial una investigación objetiva y rápida en un sumario informativo que será entregado al Ministerio Público junto a los exámenes médico forenses que establezcan las causas del lamentable fallecimiento de la cadete Poma", agrega el comunicado.

En Bolivia son comunes los entrenamientos extremos y castigos físicos a cadetes de la Policía y las Fuerzas Armadas, algo que ha sido criticado y denunciado varias veces por instituciones defensoras de los derechos humanos, como la Defensoría del Pueblo.

El Defensor del Pueblo, Rolando Villena, denunció en una carta enviada la semana pasada al vicepresidente del país, Álvaro García Linera, que en los últimos tres años al menos 20 cadetes y soldados rasos han muerto en recintos militares y hay además 300 denuncias de vulneración de derechos humanos en los cuarteles.

El Ministerio de Defensa ha replicado que están en curso investigaciones para aclarar las muertes y denuncias y ha acusado a Villena de buscar "protagonismo personal" y asumir una posición "político-partidista de oposición al Gobierno". EFE