2012 fue un año clave para la actividad de redes en investigación

Según informe gubernamental, en Bolivia existen alrededor de 1700 investigadores, una parte de ellos conformaron redes de investigación en diferentes áreas.

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Según informe gubernamental, en Bolivia existen alrededor de 1700 investigadores, una parte de ellos conformaron redes de investigación en diferentes áreas.

Esta gestión fue señalada por el ministro de Educación, Roberto Aguilar, como el primer año de funcionamiento de las Redes Nacionales de Investigación Científica y Tecnológica, que concentran a cerca de 200 investigadores en distintas áreas y desde diferentes puntos del país para promover y divulgar conocimiento, a la vez que generar una sinergia entre universidades e instituciones de educación superior.

Hasta el momento lograron nuclearse once redes de investigadores y no se descarta formar más, en función de los temas de interés que aglutinan a los investigadores, principalmente procedentes de universidades públicas y privadas. El viceministro de Ciencia y Tecnología, Pedro Crespo, explicó que a partir de la concreción de estas redes se pretende avanzar los primeros pasos en la conformación del Sistema Boliviano de Innovación.

La red de investigadores comenzó a formarse en 2011, y este año desarrolló actividades en cada una de las once áreas. Crespo explicó que existen alrededor de 1700 investigadores en el país, y que cerca de 207 forman parte de las once redes, en distintas disciplinas, que “no solamente investigan sino que recogen las demandas de la sociedad en su sector”.

Las redes de investigación están en los temas: alimentos; biodiversidad; bosques; ciencias del comportamiento; energía nuclear; energías renovables; incubadoras de empresas de base tecnológica; recursos hídricos; remediación ambiental; saberes y conocimientos de los pueblos indígena, originario, campesino y afroboliviano; y tecnologías de información y comunicación.

Si bien el Viceministerio de Ciencia y Tecnología ayudó a conformar las redes, éstas no fueron definidas, en agenda temática y/o composición por las autoridades. El proceso comenzó identificando el potencial científico del país, luego continuó ubicando a los investigadores con producción intelectual y finalmente convocando a los afines al área. La más reciente red conformada es de Paleontología, que todavía está en formación.

La red de energías renovables tiene la mayor cantidad de investigadores (47), mientras que la red de ciencias del comportamiento es la más pequeña en número (4). Las mujeres investigadoras tienen una participación minoritaria, son el 26%, pero en contraposición su presencia como coordinadoras de redes marca su liderazgo.

La mayor parte de los investigadores viene de universidades públicas (58%), un 14% trabaja en universidades privadas, un 10% en instituciones públicas, un 8% en centros privados, un 5% en fundaciones y el 5% restante es profesional independiente (aunque ligado a organizaciones no gubernamentales, organismos internacionales u organizaciones sociales).

Crespo explicó que además los miembros de una misma red pueden estar tanto en Tarija como en Cobija, y mantienen coordinación en sus trabajos y objetivos.

En mayo de 2011, por ejemplo, se conformó la red de biodiversidad sobre la base de 19 instituciones y una agenda interinstitucional que incluye los componentes de investigación y formación de capacidades y asesoramiento. Para la línea de investigación se contemplaron inicialmente tres grandes temas (conservación, manejo sustentable y conocimientos tradicionales y saberes ancestrales) que a la vez cuentan con subtemas definidos para desarrollar de manera transversal en los institutos miembros universitarios.

“Una de las actividades desarrolladas por los investigadores e investigadoras –dice el informe anual— durante sus primeros intercambios como integrantes de las diversas redes ha sido la socialización de información, de artículos científicos y otros documentos relacionados a sus diferentes áreas de especialidad. En casi ocho meses de interacción, se ha elaborado una serie de documentos técnicos que han sido socializados al interior de cada Red y que se constituye en una línea base para futuras colaboraciones entre investigadores”.

Junto a este trabajo se conformó también la Red Boliviana de Comunicación, Ciencia y Cultura, de la que participa el Programa de Investigación Estratégica en Bolivia (PIEB), con el objetivo de promover la divulgación, apropiación y popularización del conocimiento científico y saberes.

El viceministro Crespo explicó al Periódico Digital del PIEB que las redes coexisten con investigadores libres, de universidades públicas y privadas, y organizaciones no gubernamentales, entre nacionales e internacionales, con la idea de integrarse en la generación de conocimiento nuevo. PIEB

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