El crimen del padre Amaro ya está en salas bolivianas

(La Paz - Bolivia.com)

La película basada en una obra de José María Eça de Queiroz se exhibe desde ayer jueves 21, en el Monje Campero de La Paz, Avaroa de Cochabamba y Palace de Santa Cruz. Los internautas pueden visitar la página www.elcrimendelpadreamaro.com

Sinopsis

El joven Amaro, ansioso por cambiar al mundo, llega a ser sacerdote gracias a su vocación y a la buena relación con el Sr. Obispo quien lo manda a foguearse a la iglesia del pueblo de Los Reyes, Aldama bajo la supervisión del Padre Benito, para después mandarlo a estudiar a Roma.

En este pueblo conoce a la devota, inocente y sensual Amelia, hija de la Sanjuanera (dueña de la fonda del pueblo y de los amores del Padre Benito) de la que poco a poco se enamora, maldiciendo su suerte que lo condena al celibato. Así mismo la muchacha embobada por las dulces maneras del párroco, y por su compartida devoción a Dios, va cayendo en sus brazos. El destino les pone en la mesa el pretexto perfecto para caer en la tentación, la hija del sacristán Martín, débil mental, a la que deciden instruir en la palabra de Dios...

Alrededor de esta historia se entrelazan las vidas paralelas del Padre
Benito, un hombre de buena voluntad que ha caído en la tentación por ayudar a su pueblo y por no enfrentar el infierno de la soledad; el Padre Natalio, un cura "rebelde" a favor de la Teología de la Liberación que trabaja devotamente en la sierra con una pequeña comunidad y que protege a los guerrilleros de los narcotraficantes; la Sanjuanera, una mujer libre de prejuicios que está enamorada del Padre Benito; Don Paco, un español tachado de "comunista" que no cree en la iglesia ni en sus representantes; su hijo Rubén, el novio periodista de Amelia que no encaja con la comunidad puritana de su pueblo; Dionisia, una vieja sabia medio loca que está enterada de los secretos más recónditos del pueblo; un Obispo todo poderoso, más sabio por viejo que por diablo; y un Presidente Municipal con una buena vida, que hace caravanas con sombrero ajeno y como buen político, queda bien con todos.

ACERCA DE LA PELÍCULA

La lujuria, la soberbia, el fanatismo y el abuso del poder hacen presencia en esta historia que igualmente está llena de compasión, amor, búsqueda interna, arrepentimiento y todos los sentimientos que nos hacen seres humanos.

El Padre Amaro no será el primero ni el último hombre que enfrente esa
encarnizada lucha interna por mantenerse fiel a sus ideales y por no
sucumbir a las tentaciones de su débil naturaleza. De hecho, cada uno de los personajes de la historia tiene su propia lucha interior, y su formación católica los hace ver el infierno a cada instante, pero como dice el Señor Obispo "Donde abunda el pecado, sobreabunda la gracia."
Esta película sin duda hace gala del oficio del director Carlos Carrera
(quien ha ganado más de 30 premios a nivel internacional), de la brillante adaptación de Vicente Leñero que le da profundidad a cada uno de los personajes y los hace perfectamente humanos, y de las tablas y el talento de un cuadro de actores de primera categoría que ponen el alto el nombre de México en las marquesinas del cine.

EL CRIMEN DEL PADRE AMARO es una co-producción de Alameda Films (Alfredo Ripstein), Blu Films (Daniel Birman), Wanda Visión España, apoyada por el Instituto de Cinematografía (Imcine), a través del Fondo de Fomento a la Producción de Cine de Calidad (Foprocine), el Gobierno del Estado de Veracruz - Llave, El Programa Ibermedia, Cinecolor México, Videocolor Argentina, y Artcam Francia

EL CRIMEN DEL PADRE AMARO está basada en una novela costumbrista portuguesa del siglo XIX, escrita en 1875 por José María Eça de Queiroz, considerado uno de los mejores novelistas de su país, quien a través de esta obra trata de los efectos destructivos del celibato en un sacerdote de carácter débil y de los peligros del fanatismo en un lugar de provincia.

Esta novela ha sido brillantemente adaptada de manera libre, a nuestro país y época, por el reconocido dramaturgo y escritor mexicano Vicente Leñero, situando la acción en el pueblo de Los Reyes, Aldama en el año 2002, sin embargo podría ocurrir en cualquier parte de México e incluso en cualquier parte del mundo.

Esta historia surgió gracias a la tenacidad y perseverancia del productor
Alfredo Ripstein, quien desde 1970 quiso llevarla a la pantalla grande pero por diversas razones no le fue posible hacerlo sino hasta ahora. La película tuvo un tiempo de filmación de aproximadamente seis semanas y media, de principios de noviembre a finales de diciembre del 2001, y se filmó en locaciones de la ciudad de México (la colonia Guerrero entre otros lugares); en el estado de Veracruz (Xalapa, Xico y Coatepec) y en el Estado de México (Tepetlaztoc), y como dato curioso, todas ellas fueron asediadas por las numerosas admiradoras de Gael García Bernal, quien parece tener una brillante carrera por delante.

Gael retomó su acento tapatío y se preparó leyendo la Teología de la
Liberación y a Santo Tomás de Aquino para encarnar a este joven, y nos
comenta: "Por primera vez en México no voy a tener que hablar como chilango, sino como un sacerdote de los altos de Jalisco". Gael comenta que interpreta a un sacerdote progresista y nos dice, "se trata de un papel intenso, en el que la visión del sacerdote del amor y la justicia se confrontan." Él hubiera sido apadrinado en esta película en el papel del Padre Benito por Paco Rabal, el famoso actor español fallecido en septiembre del 2001, pero debido a su muerte, lo sustituyó el también español Sancho Gracia, considerado como el "hermano menor" de Rabal.

"Esta puede ser la película del próximo año," comenta entre bromas el joven García Bernal, y la verdad es que, en efecto, puede dar gratas sorpresas en la taquilla mexicana y en varios festivales internacionales que ya están interesados por presentar la película.

En cuanto a la musicalización, Carlos Carrera comenta que "está pensada para añadir cosas, no para ilustrar emociones," y cuenta con la música original de Rosino Serrano y con canciones de Pablo Montero, José Guadalupe Esparza y Julio Preciado, entre otros. El Soundtrack, próximo en estrenarse, será lanzado por BMG.

NOTAS DEL DIRECTOR (Carlos Carrera)

En 1875, Eça de Queiroz escribió la novela "El Crimen del Padre Amaro" en Portugal.

En 2002, en algunas ciudades de México, la situación que ahí se retrata no ha cambiado gran cosa. A pesar de los concilios, las conferencias
episcopales y las encíclicas, la labor de la iglesia no siempre está al
servicio de sus fieles.

Una de las reglas impuestas a los ministros de la iglesia es el celibato.
Férrea como pocas, es un precepto muy difícil de seguir por la naturaleza humana. Y es que el hecho de ordenarse sacerdote no le quita a un hombre sus impulsos. Los sacerdotes son hombres, falibles y con necesidades como cualquiera.

Las historias relacionadas con el celibato han sido inspiración para
historias en la literatura, en el cine y en el imaginario popular. El
enfrentamiento de los impulsos contra las reglas morales tiene el poder de crear un conflicto dramático de una gran fuerza.

En "El Crimen del Padre Amaro" hay dos líneas importantes: por un lado la relación entre el padre Amaro y Amelia, y por otro, la relación del poder y la Iglesia.

Aunque desde hace mucho tiempo los sacerdotes liberales procuran, además de ser guías espirituales, mejorar las condiciones reales de vida y las situaciones de justicia de la población, sectores encumbrados de la Iglesia, extremadamente conservadores, defienden activamente los intereses del poder.

A esto se suma una relación probada de ciertos grupos de interés dentro de la Iglesia con la corrupción y el narcotráfico internacional.

El Crimen del Padre Amaro es la historia de un alma buena, un joven con buenas intenciones, con fe, que poco a poco se va corrompiendo, vendiendo a los intereses de la iglesia. Ante la promesa de una mejor posición política dentro de la Institución. La generosidad y la riqueza espiritual se va convirtiendo en puro egoísmo y amargura.

En la película se pretende darle voz, por medio de la creación de personajes consistentes, a distintas posturas y dudas ante lo espiritual. Más que la maldad de personajes maniqueos, lo que nos importa es la complejidad de las motivaciones humanas.

El padre Amaro resume en su persona pasiones contradictorias. Está habitado por el deseo de cumplir con el compromiso que la Iglesia tiene con la gente más necesitada, pero no desea desobedecer a las disposiciones de la Diócesis. Su ambición lo lleva a traicionarse. También quiere preservar su relación con la joven Amelia sin que esto afecte su carrera.

El Padre Benito, quien acepta limosnas del narcotráfico, con lo cual
contribuye a su lavado, pero lo utiliza en obras de caridad y piensa que
está actuando bien. También ama a la Sanjuanera, pero está en conflicto por la ruptura de los votos de castidad.

El padre Natalio sabe que debe directamente obediencia antes a su parroquia que a la autoridad eclesiástica. Es quizás el personaje más claro en sus motivaciones, en medio de la corrupción.

Amelia es un claro ejemplo de la confusión entre amor divino y amor carnal, facilitada por la mística católica.

Dionisia vive su locura a través de la religión, lo cual, paradójicamente,
le presta un asidero a la realidad.

El Crimen del Padre Amaro me interesa por su alcance humano, por las
posibilidades que me brinda de mostrar los motivos humanos, siempre
complejos, nunca unívocos. No se trata de un juego entre las fuerzas del mal y las del bien, sino de una mirada sobre las fibras con que se tejen los seres humanos.

EL REPARTO

GAEL GARCÍA BERNAL (AMARO) El joven de ojos penetrantes y sonrisa
encantadora, famoso por sus arriesgados personajes fuertes y
controversiales, nace el 30 de noviembre de 1978 en Guadalajara, Jalisco.

Gael comenzó su carrera de actor desde muy pequeño trabajando al lado de sus padres en una serie de obras de teatro. Empezando su adolescencia protagonizó la telenovela llamada El abuelo y yo (1992). Otros de sus trabajos en televisión incluyen Al filo de la muerte, Teresa, un episodio de Queen of Swords (2000), Breakfast (2000) y Fidel (2001), una miniserie para Showtime en donde interpretó al Che Guevara. También ha aparecido en varios cortometrajes entre los que destacan De tripas, corazón (1996) dirigido por Antonio Urrutia, el cual fue nominado al Oscar por Mejor Cortometraje, y El ojo en la nuca (2000), dirigido por Rodrigo Plá.

García Bernal estudió actuación en la Escuela Central de Oratoria y Drama de Londres (Central School of Speech and Drama). La multi-galardonada Amores Perros (2000) fue su primera película grande y seguida por Y tu mamá también (2001), dirigida por Alfonso Cuarón y fotografiada por Emmanuel Lubezki, hicieron que Gael se convirtiera en la sensación latinoamericana del cine mundial.

Otros de sus trabajos para cine incluyen Cerebro de Andrés León (2000), Dreaming of Julia de Juan Gerard (2001), Sin noticias de Dios de Agustín Díaz Yanes (con Victoria Abril y Penélope Cruz), Vidas privadas de Fito Paez (2001) Lily and the secret planting (2002) de Hettie MacDonald, I'm with Lucy de Jon Sherman (2002) y ahora EL CRIMEN DEL PADRE AMARO de Carlos Carrera (2002).

Gael García también tiene numerosos créditos en teatro: El rapto de las
estrellas (Dir. Tere Suárez), Roberto Zucco (Dir. Catherine Marnas), Las
tres hermanas (Dir. Alan Dunnet), The comedy of errors (Dir. Alan Hooper), Mother courage and her children (Dir. Peta Lily), The rivals (Dir. Paul Tomlinsson), The Duches of Malfi (Dir. Sthephen) y The lights (Dir. Kristine Landon-Smith).

Entre sus múltiples reconocimientos están el premio Hugo al Mejor Actor en el Festival Internacional de Cine de Chicago por Amores Perros (2000), el Ariel al Mejor Actor por la misma película (2001), el premio al Mejor Actor en el Festival Internacional de Cine de Valdivia (compartido con Diego Luna) por Y tu mamá también (2001), el premio Marcello Mastroianni del Festival de Cine de Venecia (también compartido con Diego) por la misma película (2001), y una nominación al premio Goya como Mejor Actor de Soporte por Sin noticias de Dios (2002).