Tras una exitosa carrera de más de una década en el tenis profesional, Andy Roddick, decidió que el Abierto de Estados Unidos de este año, sería su último torneo en el profesionalismo, así despedirse en el lugar que le otorgó el único campeonato Grand Slam de su carrera el año 2003.
El día de su retiro llegó este miércoles 5 de septiembre, cuando le tocó enfrentarse a un Del Potro que se encuentra en uno de los mejores momentos en su historial. Roddick se distinguió principalmente por poderosos saques y un carácter muy cordial dentro y fuera de la cancha.