"Ambivalencias II", sinfónica y heavy metal, el próximo objetivo
La articulación entre música clásica con la electrónica y autóctona, presentada en el concierto "Ambivalencias", maravilló a un público que llenó el auditorio del Banco Central.
La articulación entre música clásica con la electrónica y autóctona, presentada en el concierto "Ambivalencias", maravilló a un público que llenó el auditorio del Banco Central.
Con el respaldo del Banco Mundial, la Orquesta Sinfónica Nacional y el colectivo Ra Beat abrieron, el miércoles 11 en La Paz, la senda de una nueva propuesta musical caracterizada por modular -en una sola obra- lo clásico, electrónico y autóctono, tras un espectáculo exitoso y sin precedentes en el auditorio del Banco Central de Bolivia (BCB), donde más de 800 personas de distintas generaciones aplaudieron el evento sonoro/visual/tridimensional.
Para el futuro, se planea la realización de un concierto que fusione la melodía y el orden sinfónico, con el poder del heavy metal.
Faris Hadad – Zervos, representante residente del Banco Mundial en Bolivia explicó que para su institución, el apoyo al arte y a la cultura es también cuestión de desarrollo. "La plata o la donación son insuficientes; nuestro trabajo tiene que ver también con el desarrollo humano. En mi región (Medio Oriente) decimos que para conocer la riqueza del país, no hay que ver solamente su dinero, sino cómo tratan a sus artistas, poetas y animales. El desarrollo tiene también mucho que ver con la creatividad y el talento de la juventud, con la capacidad de realizar sus sueños".
"La fusión de lo clásico con los estilos modernos y folclóricos demuestran que la creatividad no tiene límites y que sólo es necesario soñar para que algo se haga realidad", afirmó por su parte el cónsul de Gran Bretaña, Chriss Wall al señalar que su país tiene una rica trayectoria, que pasa desde la música clásica, el rock, el pop, la electrónica y muchos otros géneros.
En tanto, Flavio Machicado, presidente de la Fundación Centro Sinfónico Nacional valoró la primera versión de Ambivalencias como "algo distinto en el que se expresaron experiencias extraordinarias de sus protagonistas". En su criterio, con este tipo de música, se están conquistando nuevos públicos: de jóvenes y adultos; unos amantes de lo clásico y otros de lo electrónico y autóctono.
Vivian Fernández, representante del espacio cultural alternativo El Bunker, afirmó que el concierto superó las expectativas. "Los que lograron ingresar salieron fascinados; pero fue una pena que el recinto no tenga la capacidad para albergar a otros que se quedaron fuera", dijo al estimar en más de 800 los espectadores que acudieron al evento.