La final deseada. Eso tuvo ayer el plantel y la afición de Sucre cuando vio que Universitario se consagró campeón invicto de la Copa Simón Bolívar, y con ello retornó nuevamente a la Liga del Fútbol Profesional Boliviano.
Tras un fuerte susto en la primera parte, la U de San Francisco Xavier aplastó a Guabirá con un fútbol contundente, dinámico y el sobre todo el juego a un toque.
Los universitarios cerraron una campaña espectacular, porque ganaron en la final de ida y vuelta y terminaron sin una derrota.
En la primera etapa el plantel de Montero sorprendió gratamente, porque con garra y actitud se puso en ventaja a los 42' mediante Carlos Saucedo.
En el complemento, la U cambió de ritmo con el ingreso de Abdón Reyes, presionó y comenzó a cosechar los frutos de ese juego.
El público no dejó de alentar, ello le permitió a Ronald Justiniano, otra de las figuras, cobrar de manera excelente un tiro libre con el que empató el partido a los 9'.
Cuatro minutos después, una falta contra el brasileño Gómez fue sancionada como penal, Edwin Callejas marcó el
segundo.
Guabirá trató de responder, pero pagó caro el dejar vacíos en su retaguardia, porque el rival aprovechó aquello y goleó.
A los 26', la figura del partido, Reyes, ratificó su accionar y en una gran jugada individual dejó a tres rivales y anotó el tercero. Mucho más suelto, el local dominó a placer y erró algunas opciones.
Justiniano convirtió el cuarto gol a los 31' y Reyes el quinto a los 39'. Ambos volantes con mucho desequilibrio en el terreno.
La jornada no podía cerrarse con la ausencia en el marcador de Gustavo Romanello, quien marcó a los 41' y el festejo no paró. Eugenio Aduviri, enviado a Sucre
Desde la Capital
Hospitalidad • Los capitalinos dieron ayer una muestra de hospitalidad a los 200 cruceños que llegaron en cuatro buses.
Empresa • Wálter Arízaga, presidente de la U, explicó que manejó a la entidad como una empresa, para salir adelante.
Cerrado • A falta de casi una hora para el inicio del partido, las curvas fueron cerradas porque estaban colmadas.
Indirecto • El primer partido por el descenso indirecto
se jugará el próximo sábado, pero no se sabe si en Montero o Santa Cruz.
Sucre vibró ayer y se vistió de azul y rojo
Fiesta Chuquisaca vivió un día inolvidable y el primer equipo dio la vuelta olímpica tres veces.
El cimiento del estadio Patria tembló no sólo en seis ocasiones, cuando se anotaron los goles, sino antes y después del partido, con la fiesta que el público sucrense celebró.
Los gritos de gol, los cánticos de la hinchada y un estadio que se pintó de azul y oro le dieron ayer a la Capital de la República una jornada totalmente distinta. Gran parte vestía la casaca del conjunto anfitrión.
La jornada de alegría comenzó desde la mañana, cuando a partir de las 9.00 comenzaron las extensas filas para acabar con las últimas entradas y llenar el estadio con 33 mil espectadores.
Previo al partido, los aproximadamente 10 mil estudiantes, casi la mitad de los matriculados en la San Francisco Xavier, alentaron al plantel anfitrión.
Seis veces explotó el estadio con el grito de gol del local y ni qué decir cuando se pitó el
final.
En el campo de juego pasaron de la tensión inicial al júbilo absoluto. Todos se abrazaron y gran parte de los jugadores terminaron en llanto de alegría, en particular los chuquisaqueños.
La gente pidió que den la vuelta olímpica, lo hicieron sin la copa, luego dieron otra con el trofeo, y finalmente otra con parte de la hinchada, mientras el resto gritaba: “Sucre, Sucre, Sucre...”. Eugenio Aduviri, enviado a Sucre
Opiniones
Ronald Justiniano:
Volante de la “U”
Es fruto del trabajo y del esfuerzo en conjunto. No es algo individual, sino la entregada de todos. Está dedicado a todo el pueblo de Sucre que nos apoyó desde el inicio. Conformamos un grupo unido y bastante disciplinado. Ahora dialogaremos sobre nuestro futuro.
Javier Vega:
Técnico de la “U”
Quien trabaja con planificación, lo más probable es que tenga frutos, y eso logramos nosotros. En un equipo los jugadores son los protagonistas; si ellos quieren, logran el objetivo, porque el técnico llega hasta cierto lugar. Es un regalo de fin de año a nuestro pueblo.
