¿Dulce o truco?. Foto: Shutterstock
La fiesta de Halloween es celebrada en todo el mundo el 31 de octubre de cada año, previa al 'Día de Todos los Santos' o 'Día de los Muertos', conmemorada en Bolivia y México entre el 1 y 2 de noviembre.
La Paz se ha convertido en el epicentro, que cada año, involucra a centenares de familias en esta celebración extranjera.
Esta es una manifestación extranjera que en los últimos años se ha ganado un espacio en la sociedad, y en lugares como Bolivia, es celebrado con rituales andinos que son vinculados a la creencia de la visita de los espirítus al mundo de los vivos.
Es altamente probable que muchos de los que celebran hoy Halloween mañana"armen una mesa y recen a sus difuntos".
Pero, ¿qué es y cómo surge esta celebración?
Halloween o 'La noche de las brujas', como es conocido comunmente, es originario de la antigua Irlanda en la festividad céltica denominada "Samhain" que quiere decir "el fin del verano y el comienzo del año nuevo celta".
Los celtas creían, dentro de su ideología, que este mundo se encontraba unido con otro, permitiendo que los espíritus buenos y malos pasaran de un lado al otro. Se creía que el uso de máscaras y trajes ahuyentaban a estos seres malignos.
Esta celebración fue acogidaen 1840 por Estados Unidos, con la llegada de inmigrantes irlandeses, quienes llevaron sus costumbres y creencias al país, como por ejemplo, la calabaza tallada y hueca con una vela en su interior.
¿Cómo se celebra el Halloween en Bolivia?
En las creencias andinas esta celebración es el comienzo del 'Día de los Difuntos' o el 'Día de Todos los Santos' que rige la idea de que al mediodía del 1 de noviembre, el alma de los difuntos visitan a los vivos por unas horas, para lo cual se prepara un altar con alimentos, bebidas y piezas de pan como símbolos que representan su llegada.
Los altares se organizan sobre manteles negros adornados con flores blancas y retamas, cañas de azúcar, la fotografía del difunto y alimentos como: masas en forma de escalera, corona, caballos y tantawawas (figuras humanas), suspiros de dulce, bizcochuelo, maicillos y una serie de productos azucarados que significan el anuncio de que vendrán días mejores.
Al día siguiente, se despiden a los espíritus de los familiares fallecidos y se retiran los alimentos para ser distribuidos entre los presentes que rezaron frente altar o en el cementerio.
Halloween "no ha llegado para desplazar" a las costumbres locales, sino que hacen parte de las tradiciones "que se van fusionando".