La custodia del hijo de Harry y Megan, Duques de Sussex, pertenece a la Reina Isabel

La renuncia del Príncipe Harry y Meghan Markle a la familia real, otorga a la Reina Isabel la custodia del hijo de los Duques de Sussex, el pequeño Archie. Los duques irán a vivir a una ostentosa mansión en Estados Unidos después de estar en Canadá, y por supuesto, actualmente les llueven todo tipo de propuestas de trabajo para el inicio de su nueva etapa como ciudadanos, lejos de la realeza.

Hace pocos días, la Reina Isabel había aceptado la renuncia de los Duques de Sussex, a quienes extendió su apoyo y con quienes se mostró amable respecto a la decisión que tomaron. Caso contrario, ocurrió con el padre de Meghan Markle, Thomas Markle, quien reprochó a su hija por renunciar a ser una princesa.

Debido a la existencia de un acuerdo familiar, a la Reina Isabel se le otorga la custodia de Archie Sussex y de todos los miembros de la familia real. Esto lo asegura Marlene Koeing, experta en la realeza, en una entrevista concedida para Mirror, e incluso aseveró que ni siquiera la segunda línea del trono tiene legalmente la custodia de sus hijos. 

Según este acuerdo, los Duques también tendrían que solicitar el permiso a la Reina Isabel para sacar a su hijo del país. El acuerdo es conocido como la Gran Opinión para la prerrogativa de la Familia Real, y concede a la reina ocuparse por la educación de hijos y nietos, crianza e incluso matrimonio.

La ley familiar existe hace 300 años y proviene por una situación familiar presentada durante el reinado de George I, quien tenía una relación conflictiva con su hijo, próximo Rey Jorge II. A raíz de esta relación problemática y difícil entre padre e hijo, se aprobó la ley que permitió al rey ser el guardián y custodio de sus nietos.

Sin embargo, la Reina Isabel ha sido siempre una mujer condescendiente y comprensiva con su familia y lo que se cree es que así mismo será su postura respecto a lo que los Duques decidan en cuanto a su hijo.