“El digital es el cine posible en Bolivia”, dice la directora Julia Vargas, que el jueves estrenará “Esito sería” en Cine Center. Paolo Agazzi y Gustavo Castellanos estuvieron anoche en el Bella Vista.
Fotógrafa profesional y experimentada videasta, Julia Vargas incursiona en el largometraje con la obra “Esito sería”, película que estrenará en Santa Cruz el jueves. Con esa entrega, la artista cochabambina le da al público local una opción más de las múltiples
que está generando el cine boliviano.
“Esito sería” es esencialmente una película sobre el amor, la gente y los distintos placeres de la humanidad como el comer, el bailar, disfrutar la música... aunque el contexto es el carnaval de Oruro es bastante universal porque es la historia de una fiesta que conglomera a todo un país. Es una película divertida, por momentos romántica. No plantea un tema regionalista, sino integrador”, explicó ayer Julia a El Nuevo
Día, sobre su ópera prima en la cinematografía.
Cine Center acogerá este nuevo estreno nacional que se suma, en pocas semanas, a “Di buen día a papá” -que continúa en cartelera-, “Espíritus independientes”, mostrada anoche en el cine Bella Vista y al que en breve le seguirá “Sena Quina” de Paolo Agazzi”, igualmente en Cine Center.
“Como no hay mucho presupuesto hay que bregar para atraer al público y poder recuperar”, expectante, cuenta la realizadora
que llegará a esta ciudad el mismo jueves para dosificar la promoción de su obra, una ficción lograda en formato digital.
“El digital es el cine posible en Bolivia”, afirma Julia Vargas sobre el soporte que usó, que abarata costos enormemente y que además es una tendencia en Bolivia. “Esito sería” se estrenó a fin del año pasado en Oruro. Simultáneamente llegó a Buenos Aires, el Festival de Punta del Este y Cochabamba. Luego se mostró en La Paz, en El Alto.
