Por primera vez Bolivia reconoce la unión libre de una pareja homosexual

Una pareja hizo historia en Bolivia el pasado jueves 10 de diciembre. David Aruquipa y Guido Montaño llevan once años juntos y, después de dos años de una lucha jurídica, finalmente lograron que su unión libre sea reconocida.

Inicialmente el Servicio de Registro Civil (Sereci), una institución dependiente del Tribunal Supremo Electoral, rechazó registrar su unión argumentando que no estaba prevista en la legislación boliviana y que, por tanto, no se contaban con los procedimientos para hacerlo.

Sin embargo, la pareja no cedió en su intención por ser reconocida legalmente. Acudió a la justicia constitucional para que su caso sea revisado. La justificación era que la Carta Magna boliviana antepone a sí misma los tratados internacionales suscritos por el país. En este sentido, el negarles el reconocimiento como pareja implicaba una vulneración a sus derechos.

En julio de este año, la Sala Constitucional Segunda de La Paz les dio la razón y anuló la resolución administrativa bajo la cual el Sereci rechazaba otorgarle a la pareja la certificación oficial de unión libre.

En principio, el Sereci se negó a cumplir con el fallo y decidió consultar el tema a una instancia superior: el Tribunal Constitucional. Sin embargo, una nueva orden del juzgado los conminó a responder a su dictamen en un plazo de diez días. El tiempo se cumplió y finalmente, el 9 de diciembre, emitió la resolución que reconoce por primera vez la unión libre de una pareja homosexual.

En coincidencia con el Día Internacional de los Derechos Humanos, la pareja fue notificada sobre la histórica determinación que sienta un precedente para toda la comunidad LGBTI.

Pero el reconocimiento del Estado boliviano a una pareja homosexual no es algo puramente simbólico. David Aruquipa y Guido Montaño pasaron por varios problemas como consecuencia de no poder registrar su unión libre.

Por ejemplo, cuando David necesitaba una operación no pudo ser su pareja quien firme la autorización y en cambio debió espera un día más hasta que un familiar pudo hacerlo. A Guido casi le impiden viajar a México porque en la solicitud de la visa no aceptaban la cuenta de ahorros que había abierto de forma conjunta con David.

Y aunque este es un paso importante en la inclusión de minorías históricamente marginadas, todavía queda un largo camino para que Bolivia pueda garantizar a sus ciudadanos la vida libre de discriminación que su Constitución les promete.