Sergio Ramos encuentra la "felicidad", al renovar por el Madrid

La renovación de Sergio Ramos por el Real Madrid es un hecho. Después de una larga negociación, que se ha prolongado más de lo esperado en el tiempo temiendo más de un aficionado blanco por su salida, el conjunto madridista se ha asegurado el futuro del de Camas hasta 2020. Para entonces tendrá 34 años.

El vínculo de Ramos con Florentino parece distinto al de los anteriores portadores del brazalete. Foto: EFE
El vínculo de Ramos con Florentino parece distinto al de los anteriores portadores del brazalete. Foto: EFE

La renovación de Sergio Ramos por el Real Madrid es un hecho. Después de una larga negociación, que se ha prolongado más de lo esperado en el tiempo temiendo más de un aficionado blanco por su salida, el conjunto madridista se ha asegurado el futuro del de Camas hasta 2020. Para entonces tendrá 34 años.

Ramos siempre tuvo claro que su sitio estaba en el Santiago Bernabéu y así lo hizo ver en la rueda de prensa posterior a su renovación. "Mi felicidad está en Madrid, si fuera por dinero ganaría más en otro lugar", dijo en un acto multitudinario. Entre los asistentes no faltó su familia ni los miembros más representativos del club, como Florentino Pérez y Rafa Benítez. 

El central no se ha sentido valorado en algunos momentos, pero nunca tuvo la intención de marcharse, como recalcó delante de los micrófonos. El Madrid se convirtió en su hogar en 2005 y quiere que lo siga siendo hasta el momento de su retirada, si se mantiene a la altura de las circunstancias por encima de la treintena. Maldini puede ser un referente en este sentido, ya que alargó su carrera en el AC Milan cuanto deseó. Algo similar planea Ramos para tener un adiós más acorde a su historia que el de otros mitos blancos como Raúl, Guti, Hierro o Casillas, a los que no les quedó más remedio que salir por la puerta de atrás.

El vínculo de Ramos con Florentino parece distinto al de los anteriores portadores del brazalete. Apostó por él cuando era muy joven, pagándose su cláusula de rescisión al Sevilla y en el Madrid ha crecido a su vera, hasta convertirse en uno de los centrales más valorados de la actualidad. El Manchester United intentó sin éxito entorpecer las negociaciones, ya que finalmente el máximo mandatario le ha reconocido sus méritos y le ha colocado salarialmente en el rango de Ronaldo, Benzema y Bale, después de una década de servicios prestados. 

En este periodo destaca la Champions League de 2014, en la que tuvo un papel preponderante con el gol del empate en la final contra el Atlético de Madrid, que dio lugar a la prórroga y al cambio de tercio del partido. 

Tiene el apoyo de Casillas

No se conforma con aparcar aquí su currículo e intentará poner su granito de arena, para que el proyecto de Benítez desembarque en la tierra prometida con algún trofeo para las vitrinas en 2016. 

Ramos es sin Casillas el icono blanco de hoy y el que fuera su compañero en el Madrid, se ha alegrado desde Oporto  de esta revisión de contrato, merecida, según el de Móstoles. No es ningún secreto que la relación entre ambos va más allá de lo estrictamente profesional y durante un momento pareció que ambos referentes se habían puesto de acuerdo a la hora de dejar el club de sus amores. 

Sus destinos seguirán unidos en la Selección, mientras que Vicente del Bosque lo considere oportuno. El salmantino es fiel a sus principios y ni en los peores momentos prescindió del portero, cuando no contaba para José Mourinho. Juntos (Ramos y Casillas) tratarán de llevar a España a la Eurocopa de 2016 para revalidar el título cosechado en 2012.