Descenso y ascenso en Bolivia se definieron en la mesa y no en la cancha
La determinación se enmarca en el desarrollo de un torneo como el Clausura 2019, que estuvo parado por casi un mes debido a los conflictos sociales del país, lo que forzó la extensión del mismo hasta finales de año.
La determinación se enmarca en el desarrollo de un torneo como el Clausura 2019, que estuvo parado por casi un mes debido a los conflictos sociales del país, lo que forzó la extensión del mismo hasta finales de año.
Una disposición del Comité Ejecutivo de la División Profesional de Bolivia determinó el descenso de un equipo y el ascenso de otro, que debían enfrentarse en un partido de definición, pero que se vio afectado por la expulsión de un tercer equipo.
En sus puntos principales el veredicto "procede a marginar" de la División Profesional al Sport Boys de Warnes, determina el descenso directo del Destroyers y finalmente avala el "ascenso de manera directa" del Real Santa Cruz, subcampeón del campeonato de segunda categoría.
El fallo de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) explicó que "por causales ajenas" al campeonato, el Destroyers, que figuraba como último en el torneo de primera división, pierda la plaza, que ahora es del Real Santa Cruz.
La eliminación del partido fue justificado por la División Profesional ya que consideró que los equipos que debían jugarlo no tenían las condiciones "legales y técnicas", ya que el campeonato concluyó el 31 de diciembre pasado y porque después de esa fecha muchos futbolistas no tienen contratos.
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La determinación se enmarca en el desarrollo de un torneo como el Clausura 2019, que estuvo parado por casi un mes debido a los conflictos sociales del país en octubre y noviembre pasados, lo que forzó la extensión del mismo hasta los últimos días del año pasado.
En Bolivia, las reglas establecen que el equipo que quede último en el torneo de la División Profesional desciende directamente, mientras que el penúltimo debe batirse en un partido con el segundo del campeonato de ascenso, en este caso el Real Santa Cruz.
Sin embargo, los últimos puestos no estaban definidos, ya que en la última jornada del campeonato el Destroyers, último, y el Sport Boys, penúltimo, debían definir su colocación.
La situación se complicó cuando en la fecha final, el 28 de diciembre, el Sport Boys no se presentó al encuentro que debía disputar como visitante frente al Real Potosí tras argüir problemas en la reserva de un vuelo que lo llevara hasta la ciudad de Potosí.
La razón expuesta fue considerada como poco justificada, de manera que el Sport Boys fue sancionado con la pérdida de la categoría, y quedaba pendiente la lucha por el ascenso y descenso indirectos entre el Destroyers y el Real Santa Cruz.