El alcalde Iván Arias informó que se presentó una apelación a la detención domiciliaria

Esta mañana, el alcalde de La Paz, Iván Arias, mientras realizaba una inspección en el río Irpavi, anunció que está en curso una apelación al fallo que determinó su detención domiciliaria sin salida laboral. Además de esto Arias señaló que hasta ese momento no se le había notificado la determinación.

“Todavía no hemos sido notificados y apelamos a esa sentencia, esperemos que en el transcurso de las siguientes horas nos den una enmienda porque no puede ser que nos den una detención domiciliaria, el alcalde tiene que trabajar”, dijo Arias sobre la determinación del juez.

Sobre el tema, Arias aseguró que permanece en La Paz desde 2021, pues no puede viajar debido a un arraigo que se le dio por otro proceso además de pagar una fianza de 30 mil bolivianos.

“La gente sabe que estoy arraigado, no he viajado desde que estoy como alcalde, respetando un arraigo que me dieron, ya di una fianza de 30 mil bolivianos, queremos que se haga justicia. Mientras no haya notificación judicial, seguimos trabajando”, añadió el burgomaestre.

De igual manera en el Palacio Consistorial, en el centro de la ciudad de La Paz, vecinos y gremiales apoyan al alcalde, luego de que se conociera que la justicia determinó que Arias continúe siendo investigado mientras cumple con su detención domiciliaria.

“Hay gremiales que se han movilizado para que el voto popular no sea escamoteado, le pido a la gente paciencia, volvamos a creer que la Justicia actuará en regla”, señaló el alcalde.

La mañana de este miércoles el alcalde Iván Arias, denunció un “golpe municipal” y aseguró que se le sigue en “proceso absurdo, inventado y sin argumentos” por lo que declaró al municipio en estado de emergencia.

Arias emitió dichas aseveraciones luego de que un juez determinara otorgar detención domiciliara sin salida laboral además de una fianza de 50 mil bolivianos, pues es investigado en un caso de presunta violencia política cometida contra una exsubalcaldesa.

Arias considera que se trata de “un absurdo” que carece de argumentos, pues asegura que la denuncia en su contra se debe a que no asistió a una reunión social con la exsubalcaldesa. En ese sentido para el burgomaestre la medida es “absurda”.