El Sedes de Santa Cruz confirma que una menor falleció con coqueluche

Las autoridades de Salud señalan que hay otros tres casos de coqueluche que fueron confirmados

Una menor falleció a causa de la coqueluche en Santa Cruz. La menor de tan solo dos meses de edad, es solo uno de los casos confirmados de esta enfermedad, según señalan las autoridades hay otros tres casos de coqueluche. La información fue difundida por el director del Servicio Departamental de Salud (Sedes), Jaime Bilbao.

El director del Sedes de Santa Cruz, señaló que en la quinta semana de esta gestión se confirmaron cuatro casos positivos de coqueluche, pero además señaló que se reportaron 138 casos sospechosos y 64 positivos.

Sobre el caso positivo de la menor que falleció a causa de la enfermedad, Bilbao explicó que la recién nacida, tras presentar los síntomas fue derivada a una clínica privada del Plan Tres Mil de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra.

Aclaró que la menor no contaba con vacunas, por lo que recomendó a la población llevar a los menores de edad a vacunarse contra esta enfermedad para evitar los contagios y complicaciones, además pidió evitar que las personas con tos se acerquen a los menores.

La coqueluche

Se trata de una enfermedad altamente contagiosa que se transmite por las gotas de saliva que son eliminadas al toser, se calcula que un caso primario podría transmitir la enfermedad a 17 casos secundarios, pero en última instancia esto está determinado por la inmunidad del caso primario y las personas expuestas.

Desde la exposición al microorganismo hasta el desarrollo de los síntomas transcurren en promedio de siete a 10 días, pero pueden pasar entre cuatro y 21 y en raras ocasiones, en ese lapso de tiempo puede extenderse hasta los 42 días.  

Después del periodo de incubación, suelen aparecer los primeros síntomas respiratorios, que pueden ser confundidos con un resfrío, puesto que son leves, algunos son, tos, estornudos y secreción nasal.

Tras una o dos semanas de evolución de la tos, aparecen episodios de tos incontrolables, violentos, espasmódicos y sin interrupción, que suelen terminar con una inspiración también violenta y prolongada, acompañada de un silbido o un jadeo producido por el cierre parcial de la glotis.  Por lo general, se produce un vómito inmediatamente después de la crisis.

La última etapa, la de convalecencia, dura de uno a tres meses y se caracteriza por la gradual resolución de los episodios de tos. Se ha podido evidenciar que, la tos ferina provoca hemorragia subconjuntival, fracturas costales, incontinencia urinaria, hernias, síncope después de un acceso y la disección de la arteria vertebral.