¿Cómo encontrar la casa perfecta para mudarte con tu mascota?

Hoy compartimos estos consejos a tener en cuenta al elegir el hogar ideal para vivir con nuestra mascota.

Foto: Pixabay
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Hoy compartimos estos consejos a tener en cuenta al elegir el hogar ideal para vivir con nuestra mascota.

Cuando estamos buscando una nueva casa o apartamento, a veces la búsqueda puede complicarse un poco si tenemos mascotas porque también debemos pensar en las condiciones y necesidades de ellos. Hoy compartimos estos consejos para que sepas qué preguntarle al propietario o inmobiliaria si te vas a mudar con mascota y qué tener en cuenta al elegir el hogar ideal.

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Primero lo primero: normas de convivencia

A veces visitamos una propiedad y nos quedamos maravillados porque pensamos que es perfecta para nosotros, pero al momento de firmar el contrato nos enteramos de que no aceptan mascotas. Esta desilusión y frustración podemos evitarla si lo primero que preguntamos a la inmobiliaria o al propietario es si aceptan mascotas o no. Este es un criterio clave a la hora de elegir un nuevo hogar y, por supuesto debe figurar con claridad en el contrato.

Si la propiedad que nos fascinó no permite animales, tendremos que cultivar la paciencia: tampoco sirve de mucho ser insistente ya que es una afirmación que los propietarios o inmobiliarias sostienen con bastante rigidez, sobre todo en edificios (generalmente por malas experiencias previas en cuanto a la convivencia con los vecinos). 

El propietario también puede prohibir las mascotas para mantener las condiciones de la vivienda o el jardín, en los casos de alquiler de casas. Aquí sucede lo mismo, no es conveniente intentar convencer a los propietarios a pesar de que tu mascota sea la más educada del mundo, por eso siempre es mejor focalizarse en la búsqueda de propiedades “pet-friendly”.

Otra posibilidad es que sí acepten mascotas, pero solo de un tipo determinado (en general animales de porte pequeño). Lo importante es buscar con tiempo y paciencia, sin perder las esperanzas si el primer inmueble que visitamos no acepta mascotas.

El espacio ideal para tu mascota

Al mismo tiempo que nos cercioramos de que el inmueble recibe mascotas, debemos contemplar sus dimensiones y características dependiendo de nuestra mascota (sobre todo si son varias mascotas). 

Si tenemos un perro, la presencia de un lindo jardín siempre es bienvenida: allí pueden jugar y correr solos (lo que les da mucha libertad e independencia), sin necesidad de sacarlos a pasear y sin que te preocupes porque su actividad cause desorden.

Los gatos suelen llevarse mejor con los departamentos. Lo importante es asegurarse de cubrir las aberturas y balcones con mallas de seguridad para que no se escapen. 

Pero los departamentos también pueden ser buenos lugares para perros pequeños, siempre y cuando tenga su propio espacio para alimentarse y dormir. En estos casos, como no se cuenta con espacios verdes amplios, tendrás que hacer un hueco en tu agenda para pasearlo todos los días o contratar un paseador en caso de que no puedas. Los perros se acostumbran muy fácil a las rutinas.

En todos los casos, ten presente también la ubicación: siempre te vendrá de maravilla tener una clínica veterinaria cerca y parques cercanos donde salir a pasear con tu mascota.

¿Y los perros grandes?

Un perro grande equivale a un espacio grande, por eso en lo posible hay que descartar los departamentos, porque ni nosotros ni ellos viviremos con la comodidad que necesitamos. Además, por lo general los edificios tienen más restricciones en cuanto a la raza y el tamaño de los perros. En estos casos, lo mejor será buscar casas con patio o jardín, de solo un propietario. Quienes tienen dos perros o más, también deben tener en cuenta estos puntos.

Tener en cuenta a los vecinos y al propietario

Aún si la propiedad que elegimos acepta mascotas, debemos tener reparos en cuanto a los vecinos. Por ejemplo, si tu perro llora o ladra cuando te vas, hay que tener en cuenta que a los vecinos les puede afectar y quizás buscar otra solución. Otro factor fundamental es ser higiénicos y cuidadosos: vigilar que el animal se mantenga en nuestro terreno, evitar que rompa tapizado o elementos propios de la vivienda y limpiar como corresponde cuando haga sus necesidades fuera. Los problemas de convivencia son fácilmente evitables si siempre apuntamos a las buenas prácticas.

Más garantías para mudarte feliz con tu mascota

Para reforzar nuestro interés por el vínculo con el propietario y los vecinos, podemos dar incluso un paso más y demostrar que somos personas cuidadosas con nuestra mascota y que no hemos tenido problemas antes. ¿Cómo? Mediante una carta de referencia del propietario de tu casa actual que lo verifique, una nota del veterinario que asegure que estás al día con el cuidado de la salud de tu mascota e incluso una prueba escrita de que tu perro recibió o está recibiendo entrenamiento.

A todos estos reparos se les puede sumar la intención de pagar un depósito extra por cualquier inconveniencia o daño causado por nuestras mascotas, lo cual siempre será una gran señal de confianza y sinceridad. La honestidad es un valor que siempre debe primar en un vínculo inmobiliario: traer tu mascota a una propiedad donde no están permitidas no puede ser nunca una opción, genera un daño irremediable en tu relación con el propietario, antecedentes negativos e incluso te pueden sancionar por incumplir el contrato.

Buscar una propiedad apta para tu familia y tu mascota requiere de responsabilidad, respeto y paciencia. Pero ahora con estas recomendaciones en la mano se te hará mucho más fácil encontrar un lugar donde todos puedan disfrutar a pleno de la comodidad que merecen.

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