Filas en puntos de vacunación contra covid en Bolivia ante exigencia de carnet
La determinación de exigir el carnet de vacunación contra la COVID-19 para entrar a lugares públicos ha generado largas filas en los puntos de inmunización.
La determinación de exigir el carnet de vacunación contra la COVID-19 para entrar a lugares públicos ha generado largas filas en los puntos de inmunización.
La determinación del Gobierno boliviano de exigir el carnet de vacunación contra la covid-19 para ingresar a lugares públicos desde el próximo 1 de enero ha generado largas filas en los puntos de inmunización.
En varios puntos de vacunación en las regiones de La Paz, donde se encuentra la sede de Gobierno, la central Cochabamba y la oriental Santa Cruz se reportaron largas filas de personas que quieren recibir su primera o segunda dosis.
Niños, jóvenes y personas de la tercera edad esperaban su turno para recibir la vacuna contra la covid-19 impulsados por las nuevas determinaciones que se aplicarán desde el 1 de enero de 2022 en el que se exigirá este carnet para ingresar a bancos, supermercados, entidades públicas y privadas.
Varios de los jóvenes en la fila decidieron inmunizarse para asistir a fiestas de Año Nuevo, a las que podrán ingresar únicamente mostrando el certificado de vacunación, otros viajarán al interior del país, por lo que también deben portar este carnet.
Por otro lado, en los puntos para realizarse la prueba PCR o antígeno nasal, que detecta la covid-19, también hay largas filas como en Santa Cruz, la más golpeada por la pandemia.
Además un grupo de personas que se opone a las vacunas marchó este martes por las calles de La Paz con carteles que decían "salva tu vida, no a la vacuna" o "elige tu veneno de vacuna" para expresar su rechazo a las nuevas determinaciones del Gobierno.
La norma con las nuevas disposiciones señala que las personas que no deseen vacunarse deben presentar una prueba PCR con 48 horas de antigüedad para ingresar a lugares públicos.
Escalada de casos
El último reporte del Ministerio de Salud da cuenta de 2.882 casos en un día, la cifra más alta de esta cuarta ola de contagios diarios, de los cuales 1.937 se registraron en Santa Cruz.
Las autoridades sanitarias de la Gobernación de Santa Cruz pidieron a la población tomar conciencia y cumplir con las normas de bioseguridad para no tener "un enero negro" que podría colapsar las terapias intensivas ya que creen que es probable que la variante ómicron esté circulando en ese departamento.
A pesar de la escalada de casos y de las advertencias de algunos servicios departamentales de salud de una explosión de casos luego de Año Nuevo, algunas alcaldías como la de La Paz, El Alto y Cochabamba autorizaron las fiestas presentando el certificado de vacunación y con un aforo limitado.
En el caso de Santa Cruz y Tarija, al sur de Bolivia determinaron no autorizar las fiestas para evitar más contagios de covid-19.
Bolivia acumula 580.690 casos de covid-19 y 19.576 decesos desde que se reportaron los primeros contagios en marzo del año pasado.
En tanto ya se aplicaron unas 9,5 millones de vacunas en el país de unos 10,2 millones de la población vacunable, según los datos del Ministerio de Salud.
Bolivia puso en marcha la vacunación contra la covid-19 a finales de enero con el personal de salud de primera línea y la amplió en el transcurso del año a otros sectores hasta incluir desde el pasado 9 de diciembre a los niños de 5 a 11 años previo consentimiento de sus padres o tutores legales.
El país emplea vacunas chinas Sinopharm y rusas Sputnik V compradas por el Gobierno nacional, y los fármacos AstraZeneca, Pfizer y Janssen donados mediante el mecanismo Covax de Naciones Unidas.