Bolivia cierra desafiante proceso electoral tras crisis de 2019 y en pandemia
Este domingo los bolivianos culminaron con una segunda vuelta a la elección de gobernadores el largo y desafiante calendario electoral tras la crisis del 2019 y en medio de la pandemia.
Este domingo los bolivianos culminaron con una segunda vuelta a la elección de gobernadores el largo y desafiante calendario electoral tras la crisis del 2019 y en medio de la pandemia.
Los bolivianos eligieron este domingo en segunda vuelta a los gobernadores de los departamentos de La Paz, Chuquisaca, Tarija y Pando, el último ciclo de un desafiante calendario electoral en Bolivia tras la crisis política y social de 2019 y en medio de una pandemia.
La jornada trascurrió con tranquilidad pero con menos participación de los más de 2,7 millones de bolivianos que estaban habilitados para votar. El conteo se inició tras el cierre de las mesas electorales que funcionaron de 08:00 a 17:00 en medio de las medidas de bioseguridad por la pandemia.
La Paz, Tarija, Pando y Chuquisaca fueron de nuevo a las urnas ya que ningún candidato alcanzó más del 50 % de los votos o más del 40 % con 10 puntos de diferencia sobre la segunda candidatura más votada el pasado 7 de marzo en las elecciones regionales y municipales.
Pasar la página de 2019
Bolivia vivió una crisis política en 2019 que alteró el calendario electoral y tomó el rumbo de nuevo en octubre de 2020, cuando se realizaron los comicios generales, en los que por primera vez no pudo participar el expresidente Evo Morales, quien funge como jefe de campaña del Movimiento al Socialismo (MAS), que logró ganar la Presidencia con Luis Arce.
El presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Salvador Romero, dijo al inaugurar la jornada que Bolivia cierra "el ciclo electoral más complejo" de su historia (...) que estuvo precedido por una etapa difícil, que incluyó la anulación de una elección general y la destrucción de casi la mitad de la infraestructura de los Tribunales Departamentales".
"Los ecos de la agria confrontación entre bolivianos aún resuenan en los antagonismos y las polarizaciones que ahondan las brechas políticas, sociales y regionales", añadió.
Al igual que en las pasadas elecciones subnacionales, el presidente Arce no asistió a la inauguración del proceso electoral por la presencia de la misión de observación de la Organización de los Estados Americanos (OEA) a la que el oficialismo acusa de complicidad en el presunto "golpe de Estado" contra Morales en 2019.
Luis Arce dijo tras emitir su voto que "una vez más el pueblo boliviano y el pueblo latinoamericano está mostrando claramente su vocación democrática de resolver las diferencias y los problemas mediante el voto directo de la población".
Liderazgo del MAS
El Movimiento al Socialismo apuntó al apoyo de los sectores rural y suburbano para consolidar su liderazgo, luego de ganar en primera vuelta las gobernaciones de Cochabamba, Oruro y Potosí.
En las elecciones del pasado 7 de marzo el MAS no logró ganar en regiones en las que ha tenido gran presencia, incluso algunos integrantes del partido consideraron que ya era hora para una autocrítica y una reorganización dentro del movimiento.
En esos comicios, el partido oficialista obtuvo solo dos de las diez alcaldías más importantes del país y perdió algo de terreno en varios municipios.
"Hemos cumplido y acompañado a nuestros candidatos para esta segunda vuelta de elecciones subnacionales (...) El pueblo boliviano tiene vocación democrática y tenemos mucha confianza", escribió este domingo Morales en su cuenta de Twitter.
En la primera vuelta, el excandidato presidencial Luis Fernando Camacho, del partido opositor Creemos, se quedó con la Gobernación de Santa Cruz, y Alejandro Unzueta, del opositor Movimiento Tercer Sistema (MTS), con la de Beni.
Baja participación
La Alianza Observación Ciudadana de la Democracia (OCD) constató que varios puestos de votación reportaron una baja participación de ciudadanos, frente a la asistencia del 86,1 % en los comicios del 7 de marzo.
La expresidenta del Senado y alcaldesa electa de El Alto, Eva Copa, también expresó su preocupación por el ausentismo en varias mesas de esa ciudad, que años atrás fue fortín político del MAS, partido que expulsó de sus filas a la política.
Varios candidatos hicieron sendos llamados a los bolivianos en los cuatro departamentos donde se realizaba la segunda vuelta para que acudieran a las urnas.
Para estas elecciones se midieron en Tarija Álvaro Ruiz del MAS y Óscar Montes de Unidos por Tarija; en Chuquisaca Damián Condori Herrera de Chuquisaca Somos Todos y Juan Carlos León del MAS; en Pando Regis Richter del MTS y el Miguel Becerra del MAS, y en La Paz Franklin Flores del MAS y Santos Quispe de la alianza Jallalla.
El balotaje de este domingo es el cuarto proceso electoral que se realiza en medio de la pandemia, el primero fue el de los comicios generales del 20 de octubre, le siguieron las elecciones subnacionales del 7 de marzo y las del 21 de marzo en 125 mesas de cinco departamentos que tuvieron que repetir la votación a causa de sucesos que afectaron la anterior jornada.
Los cuatro departamentos tienen por ley hasta el próximo domingo para dar a conocer los resultados oficiales y está previsto que el 3 de mayo las nuevas autoridades de los Gobiernos regionales y municipales de Bolivia asuman sus cargos.