Procuraduría exige a CIDH retractarse por haberse "parcializado" con Evo Morales
José María Cabrera dijo en una entrevista que presentó una protesta formal ante la CIDH exigiéndole disculpas por entrometerse en asuntos internos.
José María Cabrera dijo en una entrevista que presentó una protesta formal ante la CIDH exigiéndole disculpas por entrometerse en asuntos internos.
El procurador general del Estado, José María Cabrera, exigió a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) retractarse y pedir disculpas a Bolivia por haber mostrado públicamente su parcialidad con un mensaje del expresidente Evo Morales en Twitter.
"El día de (ayer) hemos presentado una protesta formal en representación de Bolivia ante la CIDH exigiendo una disculpa pública ante todo el pueblo boliviano por haberse parcializado y entrometido en asuntos internos que corresponden solamente a los bolivianos", dijo.
Explicó que la CIDH, que no es una instancia judicial, sino una institución promotora y vigilante de los derechos humanos en todo el continente americano, usó su cuenta oficial en Twitter para poner un "me gusta" a un mensaje donde el expresidente y prófugo de la justicia "agita a desestabilizar la democracia boliviana".
Entonces, "la CIDH, siendo un organismo oficial, actuó (de manera) parcializada, cómo podemos imaginarnos que le dé un 'me gusta', un 'me encanta', a un mensaje desestabilizador de la democracia", manifestó Cabrera, en una entrevista con Red Uno.
Según una nota de prensa de la Procuraduría General del Estado (PGE), la CIDH respaldó el pasado martes el cuestionado mensaje de Morales en Twitter y en el que aseguraba que "los bolivianos vuelven a vivir la escasez: largas filas para comprar alimentos, medicamentos y gas en medio de la incertidumbre y pandemia. El pueblo no solo tiene que luchar contra el coronavirus sino por sobrevivir como puede, en total abandono".
Este mensaje, incluso fue calificado por la Procuraduría como "sedicioso", pues la exautoridad, desde Argentina, emite permanentemente expresiones políticas dirigidas a generar confrontación en Bolivia.
En ese sentido, la PGE considera que la CIDH "no cumplió los principios fundamentales de la OEA (Organización de Estados Americanos), en especial el principio de no intervención o injerencia en asuntos internos de los países miembros, (poniendo) en evidencia su parcialidad y sesgo político".