Presidente destaca los logros económicos de Bolivia con vistas a su reelección

Morales se refirió a esos temas al pronunciar un informe de gestión en la ciudad de Sucre, la capital legal de Bolivia, para conmemorar el 189 aniversario de la fundación del país.

Como ha hecho durante la campaña electoral que vive el país desde julio, Morales se explayó con los detalles de la situación económica del país y en las metas que, a su juicio, Bolivia debe alcanzar en 2025, cuando celebre el bicentenario de su creación.

Citó que desde el 2006, el crecimiento se situó en una media anual del 5 %, mientras que en el período 1999-2005, fue de 2,9 %.

El año pasado, el producto interior bruto (PIB) de Bolivia creció en 6,8 % y para este año, según un reciente informe de la Comisión Económica para América Latina (Cepal), se espera un 5,5 %, el segundo mejor crecimiento en Latinoamérica y el mayor en Suramérica.

Morales subrayó que en 2005 Bolivia ocupó el décimo lugar en el crecimiento del PIB en Suramérica, en 2013 tuvo un segundo lugar y este año podría tener ese primer lugar pronosticado por la Cepal.

La inversión estatal en 2005 fue de 629 millones de dólares, pero el 70 % provenía de créditos y de cooperación, mientras que en 2013 esa cifra se situó en 4.546 millones y para este año se ha planificado una cifra de 6.395 millones, agregó.

Los ingresos que recibe Bolivia por la venta de sus hidrocarburos sumaron 600 millones de dólares en 2005 y para este año se esperan más de 6.000 millones, apuntó.

La nacionalización petrolera decretada en 2006 permitió a Bolivia controlar el negocio del gas aumentando los ingresos del Estado y reduciendo los de las privadas, en un contexto en el que los precios internacionales de hidrocarburos se multiplicaron varias veces.

El mandatario también destacó la reducción de la extrema pobreza del 28 al 18 % en su gestión, el aumento de inversiones extranjeras, el incremento de salarios, la baja del desempleo, el crecimiento de las reservas internacionales, de los depósitos bancarios y el que la mayor parte de estos sean en bolivianos, en lugar de dólares.

El 90,1 % de los créditos y un 79 % de los ahorros en los bancos están en divisas bolivianas, que es una moneda "fuerte, segura y por eso el pueblo boliviano ya no confía en el dólar", sostuvo.

También destacó la construcción de infraestructuras de integración, pero reconoció que Bolivia debido a problemas internos perdió dos créditos brasileños para dos carreteras en la Amazonía.

Por contra, anunció que se pedirá ayuda a China para sacar adelante un ferrocarril que integrará el este y el oeste de Bolivia y, por tanto, también territorio brasileño con peruano.

Entre los objetivos que Bolivia debe alcanzar hasta 2025 según Morales están la erradicación de la extrema pobreza y convertirse en el "centro energético" de Sudamérica, al llegar a exportar un mínimo de 3.000 megavatios a los países vecinos.

A propósito del sector, dijo que avanzará con su plan para que Bolivia desarrolle un plan de energía nuclear con fines pacíficos y anunció que creará este año un consejo para ponerlo en marcha.

Asimismo, Morales se ha planteado que su país sea un "centro de producción alimenticia", para lo que se aspira a ampliar las tierras productivas, desde tres millones de hectáreas a diez millones.

El gobernante también dijo que se apunta a que Bolivia exporte medicamentos para 2025, o incluso antes, dentro de una iniciativa en la que está recibiendo colaboración de Cuba.

Morales cerró el discurso centrado en asuntos económicos abogando porque las elecciones convocadas para el próximo 12 de octubre sean una fiesta democrática y porque se respete al ganador de la disputa.

"Se acabaron los tiempos de confrontación, son tiempos de conciliación para el bien de nuestra querida Bolivia", dijo.

Morales se enfrentará a cuatro opositores para buscar un tercer mandato hasta 2020 con el aval del Tribunal Constitucional (TC).

Pese a que la Constitución promulgada hace cinco años permite solo dos mandatos consecutivos, el TC respaldó la candidatura del presidente con el argumento de que su primer período (2006-2010) no cuenta para ese cómputo porque Bolivia fue refundada en 2009.

Las primeras cuatro encuestas publicadas por los medios en las dos últimas semanas reflejan una preferencia por la candidatura de Morales, con un respaldo de entre el 41 % y el 59 %. EFE