Las legislaciones y los casinos en Bolivia
No se puede negar, que en Bolivia, en términos de juegos de azar y casinos, existe un retraso en materia de implementación de los mismos.
- Obtener la licencia o autorización para el desarrollo de las actividades de juegos de lotería y de azar.
- Permitir y facilitar las actividades de fiscalización e inspección que realice la autoridad designada en esta Ley, de sus establecimientos, tipos de máquinas y su funcionamiento, instrumentos, documentos contables, registros informáticos y cualquier otra información.
- Llevar registros contables de sus operaciones.
- Proporcionar al jugador la información sobre la operación y procedimiento de los juegos que oferte.
- Garantizar y asegurar el desarrollo de los juegos pagados por el jugador.
- Otorgar a la conclusión del juego la totalidad de los premios ganados por el jugador.
- Resguardar los derechos de los jugadores establecidos en esta Ley.
- Cumplir las normas técnicas previstas para cada juego.
- Hacer cumplir las condiciones para la admisión a salones de juego o casinos, previstas en el Artículo 16 de la presente Ley.
Otras establecidas por el nivel central o los gobiernos autónomos en el marco de sus competencias
Ahora bien, con la llegada de los casinos en línea y su participación a través de los sitios web, el gobierno no puede censurar las plataformas provenientes de otras partes del mundo, como tampoco, la posibilidad de que los futuros casinos nacionales ofrezcan a sus usuarios el poder jugar a través de su ordenador y los dispositivos móviles como los smartphone y las tablets.
Por lo tanto, estas instituciones y plataformas deben ajustar sus clausulas términos y condiciones que ofrecen a sus jugadores, a las mismas leyes promulgadas por la ley del 25 de noviembre del 2010 referente a los juegos de azar. Lo mismo ocurre cuando pueden ser fiscalizadas e intervenidas por la Autoridad de la Fiscalización del Juego.
Lo que ocurre es que a pesar de que aun no existen legislaciones fuertes en lo referente a los juegos en línea, lo poco que se ha desarrollado por lo pronto se encuentra lo suficientemente robusto para brindar aval a los jugadores en línea. Esto quiere decir, que el gobierno boliviano puede emprender acciones a las plataformas de apuestas online en pro de responder una petición de algún usuario.
Los derechos de los apostadores están más que legalizados actualmente por todo lo que el gobierno boliviano ha gestionado en materia de juegos de azar, universalizando así su aplicabilidad aunque sus escenarios de juego sean los relativos a los espacios digitales ofrecidos en la web.
Al suscribirse a un casino online, un boliviano puede realizar una apuesta totalmente segura al aceptar las políticas que le ofrece un casino internacional, que por lo pronto son los que mayor participación tienen en el mercado nacional. Lo relativo a impuestos y deducciones ya está teniendo prioridad, por lo que el gobierno boliviano ya está percibiendo ingresos al respecto para ser implementados en las acciones del estado referente a la educación, la salud pública y las fundaciones de caridad, tal como se dijo previamente.
En el caso de que un usuario llegue a comprobar que sus oportunidades de juego están siendo vulneradas y que dicho casino online este violentando las leyes naturales que debe ostentar como centro de juegos de azar, entonces puede iniciar un proceso de demanda sobre dichos casinos, utilizando como alegato a la actividad misma que tiene la Autoridad de la Fiscalización del Juego que tiene a su disposición el gobierno boliviano.
Con todo esto, queda claro que en materia legislativa, pese a que aun existe un retraso frente a las políticas y leyes creadas por otros gobiernos en Latinoamérica y el resto del mundo, el país de Bolivia se encuentra del todo preparado para aceptar las plataformas de juego online y beneficiar así a todos sus apostadores.