Crean sistema de alerta temprana de Riesgos de Incendios Forestales

A partir de un modelo estadístico que combina variables tales como contenido de humedad del ambiente, velocidad del viento, distancia a focos de calor acumulados hasta la fecha y una máscara de sabanas naturales, un equipo de científicos e investigadores de la Fundación Amigos de la Naturaleza (FAN) elaboró un Sistema de Alerta Temprana de Riesgos de Incendios Forestales (SATRIFO) para las tierras bajas de Bolivia.

El responsable del proyecto, el especialista en Sistemas de Información Geográfica, Armando Rodríguez, explicó que el SATRIFO fue elaborado por un equipo de profesionales de la FAN en el propósito de brindar información práctica y oportuna para la planificación de quemas, la prevención, el control y monitoreo de incendios forestales en Bolivia.

La herramienta fue desarrollada por Armando Rodríguez, Carlos Pinto, Robert Muller, Rodney Carmargo y Verónica Ibernegaray, en el marco del proyecto “Manejo adaptativo del fuego alrededor de las Áreas Protegidas del Bloque Chiquitano”.

“La información es generada a partir de un modelo estadístico que permite generar diariamente reportes sobre riesgos de incendios forestales para la región. Este modelo combina variables tales como contenido de humedad, velocidad del viento, distancia a focos de calor acumulados hasta la fecha y una máscara de sabanas naturales”, señaló el investigador forestal.

Los reportes son generados para la totalidad del departamento de Santa Cruz, las tierras bajas de Beni, Pando y parte de La Paz y Cochabamba. La información generada es difundida diariamente a instancias competentes, organizaciones locales y otros actores involucrados en la problemática de los incendios forestales a través de los reportes y boletines difundidos vía email por parte de la FAN y la Gobernación Autónoma Departamental de Santa Cruz.

El SATRIFO proporciona según el especialista, un análisis histórico y de la problemática, que considera aspectos como la trayectoria de los incendios, la superficie y áreas quemadas, ofrece información para el adecuado manejo de fuego, así como información dirigida a la educación, divulgación y predicción de riesgos de incendios regionales que consideren aspectos climáticos y ambientales como el número de días sin lluvias, humedad relativa y velocidad de vientos.

Dentro del componente de prevención del riesgo a incendios comunitarios, también se contemplaron las proyecciones a futuro que tomen en cuenta los combustibles forestales.

“Para mejorar la llegada de la información a las comunidades, se instalaron letreros de los riesgos de incendios en 20 comunidades y se capacitaron a 31 delegados comunales de los municipios de Roboré y San José de Chiquitos del departamento de Santa Cruz”, señaló.

Los delegados comunales son los responsables de realizar mediciones diarias de las condiciones climáticas con la ayuda de equipos portátiles, permitiéndoles establecer el grado de riesgo de incendios para difundirlo al resto de la comunidad.

Para mejorar la resolución espacial y temporal de la información se instaló una estación meteorológica en San José de Chiquitos en el departamento de Santa Cruz.

Por el tipo de superficies afectadas por los incendios forestales y quemas por chaqueos durante el año 2012, la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Bosques y Tierras (ABT) identificó que la actividad ganadera concentró el 65 por ciento de los focos de calor, seguido por el área agrícola con el 13%, las Tierras de Producción Forestal Permanente (10%), las Reservas Forestales (8%) y las Áreas Protegidas (AP), además del 4%.

Los datos muestran según el análisis de la ABT, que la gran parte de los incendios y focos de calor fueron provocados por la intervención de la mano del hombre, por tanto, se debe más a un fenómeno de tipo antrópico que a efectos climáticos. De los los últimos años, el 2010 batió récords de focos de calor contabilizándose 50 mil a nivel nacional.  [Contacto: arodriguez@fan-bo.org]


Fuente: PIEB