Cómo atraer la buena fortuna a tu vida
Todos queremos ser afortunados, y en el afán hemos mutilado conejos, rehuido pasar por debajo de alguna escalera y por nada del mundo rompemos un espejo entre muchas otras.
Todos queremos ser afortunados, y en el afán hemos mutilado conejos, rehuido pasar por debajo de alguna escalera y por nada del mundo rompemos un espejo entre muchas otras.
Es curioso, pero si algo tiene la suerte es que es un evento fortuito. Va contra todas las probabilidades y no se sujeta a la voluntad humana. Por eso cuando alguien obtiene algo que era impensable se dice que tuvo mucha suerte. Y es que hablar de azar y fortuna es hablar de posibilidades, y cuando se trata de posibilidades siempre podemos hacer la pelea para inclinar la balanza de nuestro lado.
Especialmente, porque lo más importante a tener en cuenta cuando hablamos de la suerte es que puede ser buena o mala. Algunas cosas pasan sin importar lo que hagamos y otras requieren de lo que hagamos para que pasen.
Por eso para que de una vez por todas te sientas afortunado sin tener que dejarlo en manos de hechizos, supersticiones o amuletos, te comparto algunas ideas al respecto de lo que la suerte es y lo que necesitas tener presente en tu día a día para que no te falte.
La suerte está en tu cabeza: Ten pensamientos positivos. Pensar que puedes lograr algo te permitirá sentirte confiado y fuerte. Y si tienes el ánimo alto, lo más seguro es vayas tras lo que deseas y que lo logres.
Sé intrépido y entusiasta: No temas hacer cosas nuevas: Quién sabe, tal vez sea todo lo que necesitas para lograr lo que no te atreves. Recuerda que si quieres oportunidades ilimitadas, lo primero que debes hacer es no limitarte.
No te des por vencido: Muchas son las personas que dicen no tener suerte y se rinden al primer obstáculo. Si tú quieres que la suerte te sonría, debes intentarlo hasta sacarle la carcajada.
Identifica qué es lo que quieres: Piénsalo, si tú no sabes qué camino quieres tomar, ¿cómo sabrás que estás teniendo suerte? Al saber cuál es tu meta, podrás enfocarte para alcanzarla.
Rodéate de personas que sumen y te animen: Muchas veces la verdadera suerte está en las personas que tenemos a nuestro lado, que confían en nosotros, que creen en nosotros. Así que no menosprecies la fortuna que es tener gente que te quiere y que te desea lo mejor siempre.
Cree en ti misma: Si el punto anterior falla, uno que siempre da resultado en creer en ti, apostarte a ti y seguir tus instintos. Ninguna buena fortuna está completa si el sujeto en cuestión no se siente con suerte.
La vida es muchas cosas menos un camino recto y la suerte a veces es circunstancia y otras veces consecuencia. Estar preparados para todos los escenarios posibles y saber sacar partido de cada uno de ellos, como enseñanza o como triunfo, es el valor máximo de la buena fortuna. Al final, la voluntad es por sobre todas las cosas el combustible que nos mueve y es capaz de escribir o reescribir nuestra historia.
Por Yordanka Pérez Giraldo / Deseret News.