Por: Redacción Vida Sana - ABI • Bolivia.com

La vacuna Sputnik V tiene una eficacia de 83% contra la variante Delta

Se trata de los datos de estudios clínicos realizados en Rusia.

La vacuna Sputnik V tiene una eficacia del 83% contra una de las variantes de la COVID-19. Foto: EFE
La vacuna Sputnik V tiene una eficacia del 83% contra una de las variantes de la COVID-19. Foto: EFE

Se trata de los datos de estudios clínicos realizados en Rusia.

La vacuna Sputnik V tiene una eficacia de alrededor del 83% contra la variante delta del coronavirus, aseguró el ministro de Sanidad ruso, Mijaíl Murashko.

"Hoy por hoy la vacuna Sputnik V muestra una gran eficacia para prevenir y combatir la cepa delta. Los últimos resultados indican que la eficacia roza el 83%", dijo el titular a los periodistas.

El ministro explicó que se trata de los datos de estudios clínicos realizados en Rusia.

Previamente, un estudio similar fue llevado a cabo en la India y también comprobó la eficacia de la Sputnik V contra la variante delta, detectada por primera vez en el país asiático.

Murashko agregó que la eficacia de la vacuna rusa contra el desarrollo grave de la COVID-19 "prácticamente supera el 95%" y que también previene casos que requieren de hospitalización.

"Es decir que el fármaco hoy por hoy es eficaz y sigue funcionando", concluyó el responsable de Sanidad.

La vacuna Sputnik V fue desarrollada por el Centro de Epidemiología y Microbiología Nikolái Gamaleya con la financiación del Fondo Ruso de Inversión Directa y la primera en ser registrada en el mundo, el 11 de agosto de 2020, pero la falta de datos sobre su composición generó escepticismo en un inicio.

Aunque Argentina, México, Guatemala, Bolivia, Honduras, Paraguay y Venezuela viven la escasez de este componente, "dada la demanda mundial" sin precedentes, "todos los productores de vacunas están experimentando algunos problemas de suministro a corto plazo".

Pero, ¿por qué hay tan pocas segundas dosis?

Empresas rusas contratadas por el Estado para fabricar la vacuna señalaron que el hecho de usar dos vectores diferentes para las dos dosis complica su fabricación.

"El producto es bastante difícil de hacer y hay que fabricar dos diferentes", explicó el director ejecutivo de Biocad, Dimitry Morozov, cuya compañía es una de las principales fabricantes de la Sputnik V.

Las farmacéuticas citadas también dijeron que producir el segundo componente "es más difícil" que producir el primero.