Cobija se declara en emergencia tras el desborde del río Acre

Debido a las lluvias, se reportó el desborde del río Acre, en ese sentido, la Alcaldía de Cobija, se declaró en estado de emergencia. Así lo hicieron conocer desde el Comité Municipal de Reducción de Riesgos y Atención de Desastres (Comurade).

 Un reporte de Unitel señala que, debido a estos efectos de las lluvias, personal de las Fuerzas Armadas y la Unidad de Riesgos Municipales brindan ayuda en las zonas afectadas. Colaboran en la evacuación de las personas debido a las inundaciones.

A pesar de haber tomado medidas, el caudal del río Acre continúa creciendo por lo que sigue inundado diferentes zonas de la región y, por lo tanto, afectando a más viviendas.

En ese sentido la alcaldesa de Cobija, Ana Lucia Reis, informó que el Consejo Municipal De Cobija aprobó la modificación presupuestaria para la atención humanitaria, con lo cual se permitirá el uso de recursos del Plan Operativo Anual (POA).

De acuerdo con la alcaldesa, el presupuesto de la Unidad de Gestión de Riesgos solo permite pagar salarios, por lo que afirma que el municipio requiere apoyo, esto debido a la situación que se presenta ahora por las intensas lluvias y el desborde del río Acre.

El reporte de Unitel califica al panorama domo “desolador”, pues las cámaras de este medio pudieron captar como las aguas del río alcanzan los techos de varias viviendas, con lo cual varias familias tuvieron que evacuar sus hogares y acudir a albergues en zonas más altas.

Cabe señalar que el río Acre habría llegado hasta los 15,58 metros, este lunes, por lo que advierten que podría continuar creciendo durante este martes.

Hay que recordar que, desde el Viceministerio de Defensa Civil, informaron que, las intensas lluvias en diferentes regiones del país dejaron un saldo de 13.112 familias afectadas.

Defensa Civil señala que uno de los departamentos duramente afectados es Pando, donde se activó la alerta roja en Bolpebra, Cobija y Porvenir. En esta región se registró el desborde del río Acre, que afectó a al menos 150 familias que tenían sus viviendas en las orillas del río.