Fallece Marco Antonio Aramayo, culpan a la retardación de justicia y desfalco del Fondo Indígena queda impune

Este martes a horas de la madrugada se informó del deceso de Marco Antonio Aramayo, quien era el exdirector del ya extinto Fondo Indígena. Los médicos informaron que falleció en las unidades de terapia intensiva del Hospital Municipal Cotahuma luego de un segundo paro cardiorespiratorio que ya no pudo soportar.

Aramayo fue director del Fondo Indígena de Bolivia entre 2013 y 2015. Había denunciado una presunta corrupción de la institución en ese último año, lo siguiente que la justicia hizo, fue emitir una orden de detención preventiva que se prolongó por siete años hasta el día de su muerte.

El exdirector del Fondo Indígena (Fondioc) enfrentaba 256 procesos por presunta corrupción, siendo el único apresado por todo este periodo de tiempo.

"Hermano Presidente: Yo informé, 15 días después de asumir como director del Fondioc, las diversas irregularidades que se cometían en el Fondo Indígena. Por esa razón solicité al directorio la auditoría por la Contraloría en septiembre de 2013, para una reestructuración del Fondo", es el fragmento de una carta de Aramayo, escrita en 2016 desde la cárcel de San Pedro de La Paz y dirigida al entonces presidente de Bolivia Evo Morales.

Un año antes a esta carta, Aramayo difundió un video en el que denunciaba que Nemesia Achacollo habría autorizado el desembolso de 575 millones de bolivianos para proyectos "pese a que la entidad tenía una deuda millonaria" y la entidad estatal estaría en la quiebra.

Respecto a lo sucedido, el viceministro de Justicia, César Siles, afirmó que en el caso de Marco Aramayo la Fiscalía y el Consejo de la Magistratura tienen mucho que investigar debido a que la “retardación de justicia fue evidente”.

Marco Antonio Aramayo tenía encima más de 200 procesos por el mismo caso y una sentencia de cinco años que jamás fue cumplida, pues, aunque estuvo siete años en la cárcel, siempre estuvo retenido en calidad de detención preventiva, como un “chivo expiatorio”.

En estos días varias autoridades y actores políticos se expresaron respecto al estado de Marco Antonio Aramayo y tras su muerte, el ministro de Gobierno Eduardo del Castillo asegura que “El Régimen Penitenciario no ha escatimado los esfuerzos para salvarle la vida” y por su parte, el director del Régimen Penitenciario dijo “hemos cumplido como corresponde nuestra responsabilidad y de eso también es testigo la misma familia”, aseguró Juan Carlos Limpias, negando que haya habido negligencia por parte de la justicia.

El desfalco millonario al Fondo de Desarrollo para los Pueblos Indígenas Originarios y Comunidades Campesinas (Fondioc) es uno de los hechos de corrupción que ha puesto en evidencia la mala administración de los recursos económicos del país que dejó un daño económico al Estado de más de 102 millones de bolivianos.

El Movimiento Al Socialismo (MAS) utilizó los recursos para campaña política, obras fantasma y desembolsos en cuentas personales, entre otros. Sin responsables, pese a estar identificados, y en la impunidad.

Todo salió a luz a raíz de denuncias realizadas por Marco Antonio Aramayo, quien advirtió a la exministra de Desarrollo Rural Nemesia Achacollo de una serie de irregularidades, y le solicitó una auditoría para frenar la corrupción y por esto, él fue destituido de su cargo y comenzaron procesos en su contra.

Todo esto quedó en nada y hasta ahora el hecho queda impune tras su muerte.

La muerte del exdirector del Fondioc se suma a la del expresidente del Servicio Nacional de Caminos (SNC) José María Bakovic, dos víctimas de la "justicia azul" que murieron cercados por procesos, luego de denunciar hechos de corrupción al interior del Gobierno del Movimiento Al Socialismo (MAS).

En 2013, Bakovic, falleció en el Hospital Belga de Cochabamba, donde se encontraba internado en terapia intensiva. El exfuncionario había llegado a tener 72 procesos judiciales en su contra y fue condenado a tres años por daño económico al Estado en la construcción de la carretera Tarija-Potosí.