Indígenas bolivianos exigen con una marcha respeto por sus tierras y cultura
Decenas de indígenas del noreste amazónico marchan hacia Santa Cruz exigiendo respeto a sus tierras y cultura al sentirse amenazados por las "invasiones territoriales" en sus zonas.
Decenas de indígenas del noreste amazónico marchan hacia Santa Cruz exigiendo respeto a sus tierras y cultura al sentirse amenazados por las "invasiones territoriales" en sus zonas.
Decenas de indígenas del noreste amazónico de Bolivia avanzan hacia la ciudad oriental de Santa Cruz, la mayor del país, en una caminata con la que exigen respeto por sus tierras y forma de vida al sentirse amenazados por las "invasiones territoriales" en sus zonas.
La marcha, que partió el pasado 25 de agosto desde la ciudad de Trinidad, la capital del departamento amazónico de Beni, ha recorrido hasta este lunes 106 kilómetros, dijo a Efe el dirigente Marcial Fabricano.
El objetivo es recorrer 550 kilómetros hasta Santa Cruz, a donde prevén llegar el 22 o 23 de septiembre, explicó Fabricano, un líder histórico de los pueblos indígenas del oriente que en 1990 encabezó una marcha que puso en el mapa a estas etnias ignoradas durante décadas por el Estado.
El dirigente señaló que los pueblos indígenas ven que hay "mucha injusticia" y se sienten "amenazados de vivir" en su propio territorio.
"Sentimos una inseguridad permanente, incertidumbre, hay invasiones territoriales en diferentes regiones, especialmente en la región amazónica de Bolivia, en el oriente y en el Chaco boliviano", denunció.
En estas regiones hay pueblos originarios "con identidad y con cultura", además de habitantes no indígenas "que también necesitan vivir" con "tolerancia y seguridad", manifestó.
Para Fabricano, el mayor problema para los indígenas de tierras bajas es la "invasión" de sus territorios y un "avasallamiento cultural" que se ha intensificado y que intenta "cambiar" el estilo de vida de estos pueblos "mediante otras prácticas".
También consideró que esta marcha será una oportunidad para unificar a los pueblos indígenas de tierras bajas que han quedado "dispersados, disgregados orgánicamente por todas las diferentes corrientes de ideología política", lo que les "ha dañado".
Fabricano lideró en 1990 la marcha de un millar de indígenas de diferentes etnias que recorrieron a pie más de 600 kilómetros desde Trinidad hasta La Paz para reclamar atención a sus demandas de "dignidad y territorio".
Aquella movilización consiguió que el Estado reconozca tres territorios de un total de dos millones de hectáreas y se propongan reformas constitucionales para reconocer los demás derechos de los pueblos originarios.
Los indígenas de la Amazonía boliviana protagonizaron posteriormente otras marchas de Trinidad a La Paz, como las de 2011 y 2012 en contra de un proyecto del entonces Gobierno de Evo Morales para construir una carretera en medio de una reserva natural en el centro del país.
La nueva marcha es cuestionada por indígenas afines al gubernamental Movimiento al Socialismo (MAS) y parlamentarios oficialistas que aseguran que tiene móviles políticos.
El problema por la distribución de tierras y las denuncias de invasiones de territorios indígenas por parte de colonos ha causado tensiones recientemente entre el Gobierno de Luis Arce y la gobernación de Santa Cruz, al mando del opositor Luis Fernando Camacho.
Arce defiende que la distribución de tierras es competencia exclusiva del Gobierno central, mientras que Camacho ha advertido de que no permitirán "que atropellen" las áreas protegidas, ni territorios indígenas.