Los educadores viales denominadas Cebras vuelven a las calles de la ciudad de La Paz
Al menos 70 jóvenes son parte de este proyecto para la educación vial en la ciudad de La Paz
Al menos 70 jóvenes son parte de este proyecto para la educación vial en la ciudad de La Paz
Desde la Alcaldía de la ciudad de La Paz, anunciaron este jueves, que las Cebras retornaron a las calles de la urbe para promover la educación vial. De acuerdo con el reporte al menos 70 jóvenes y señoritas son parte de este proyecto.
En ese sentido, este jueves los educadores viales fueron parte de una caminata en El Prado paceño, mientras exclamaban “orgullosas estamos de vuelta”. La población pudo evidenciar el retornó de las cebritas a las calles de la urbe.
El secretario municipal de Culturas y Turismo, Rodney Miranda, fue parte del retorno de este ícono paceño, que promueve diferentes valores especialmente en el marco de la educación vial.
Miranda estuvo presente en el acto oficial del regreso de las Cebras en la plaza Venezuela, donde además la población dio la bienvenida a los jóvenes que son parte de este proyecto.
“El icono de los paceños, el icono de lo que significa la cultura ciudadana hoy vuelve, estábamos a la espera de la aprobación del Concejo (…) paciencia, tolerancia y además respeto a las cebras que educan y hacen un trabajo de formación ciudadana”, dijo Miranda.
Hay que recordar que el 19 de febrero de este año, la Alcaldía de La Paz suscribió el convenio de cooperación con la Asociación Civil Hogar de Niños Alalay, para que este año alrededor de 70 jóvenes formen parte del proyecto.
Después de semanas de espera el Concejo Municipal de La Paz este miércoles se aprobó la Ordenanza Municipal 4280, que autoriza el convenio de cooperación entre el Gobierno Autónomo Municipal de La Paz y la Asociación Civil Hogar de Niños Alalay para dar continuidad al programa Cebras Educadores Urbanos.
Según señala AMUN el trabajo entre ambas instituciones “generará acciones para reafirmar los procesos de reinserción social, dando así oportunidades de interacción de los jóvenes con la población en general, en especial con niños y niñas que reconocen a la imagen de la Cebra un referente de amor, respeto y cuidado de la niñez, inculcando afecto, empatía y cordialidad”.