Evo se sumó a la tendencia de los patitos "kawaii" en redes sociales
Evo Morales se sumó a la tendencia de los patitos "Kawaii" que ha inundado a Bolivia.
Evo Morales se sumó a la tendencia de los patitos "Kawaii" que ha inundado a Bolivia.
El expresidente y líder del Movimiento al Socialismo (MÁS), Evo Morales, se sumó a la tendencia de los patitos "kwaii", un accesorio que se ha sumado a las cosas "más usadas" en Bolivia.
“Ay patito, patito. Patito de la laguna. Tú nomas tienes la culpa. Para mi perdición. Ay patito, patito (…)”, le cantó Morales a un pequeño que se le regaló en uno de los eventos del MÁS.
Morales estaba compartiendo con algunos jóvenes del Plan Tres Mil que se lleva a cabo en Santa Cruz de la Sierra. El niño que se le acercó al expresidente con la caja de patitos "Kawaii" le puso uno, que tenía una corona. Muchos de los seguidores en redes sociales le comentaron que "eso era una señal de que la corona, era porque sería presidente, nuevamente en el 2025", escribieron.
Los patitos en la cabeza es una moda japonesa que rápidamente se viralizó en Bolivia, su nombre proviene de la palabra nipona "Kwaii" que quiere decir "tierno o bonito".
Algunos usuarios en redes sociales les atribuyen significados diferentes al uso de los patitos en la cabeza, esos elementos se usan como "sombreritos" con una especie de pinza para el cabello y un resorte. Usualmente, se consiguen en La Paz por unos Bs. 5 y a Morales le regalaron una cajita llena de "patitos".
Los patitos también se ha viralizado en Perú, en el vecino país, se han usado como una muestra de "protesta" sobre el maltrato animal. Se han visto animalistas usándolos en festivales gastronómicos y cerca del Cercado de Lima.
Sin embargo, los juguetes fueron ideados para brindar un mensaje de entusiasmo y personalidad. Algunos de los "patitos" usan gafas, tienen sombreritos y cada vez, aparecen más detalles para personalizarlos y poder usarlos.
Aunque la procedencia real es incierta, se tiene conocimiento de los primeros "patitos" en Japón durante el 2020. Se usaban como un pequeño accesorio en el sombrero de las féminas. Pero el dato es incierto. También se usaban sin motivo, más que para alegrar a los niños y compartir un mensaje de ternura y simpatía para quienes lo usen.