La escalofriante historia real tras 'El Conjuro 3: El diablo me obligó a hacerlo'
La cinta que hace parte de la saga 'El Conjuro', ambientada en los años ochenta, se basa en el caso de Johnson, que conmocionó incluso a los experimentados Warren.
La cinta que hace parte de la saga 'El Conjuro', ambientada en los años ochenta, se basa en el caso de Johnson, que conmocionó incluso a los experimentados Warren.
Pasa en el cine... pasa en la vida real. Al igual que 'The Conjuring 3' ('El Conjuro 3'), basada en el relato de Arne Johnson, son varios los casos estremecedores reales que han saltado a la pantalla grande en la que una frase como "el diablo me obligó a hacerlo" hace parte de historias terroríficas como 'The Amityville Horror', 'The Texas Chain Saw Massacre' y 'The Possession'.
'The Conjuring: The Devil Made Me Do It' ('El Conjuro 3: El diablo me obligó a hacerlo'), dirigida por Michael Chaves y protagonizada por Vera Farmiga y Patrick Wilson, quienes dan vida a Lorraein y Ed Warren, investigadores de fenómenos paranormales, se estrenó el pasado 4 de junio en varias salas de cine de Estados Unidos en plena pandemia y ha logrado recaudar 59,7 millones de dólares a nivel global, posicionándose entre las 10 más vistas, según el portal IMBD.
La cinta que hace parte de la saga 'The Conjuring' ('El Conjuro'), ambientada en los años ochenta, se basa en el caso de Johnson, que conmocionó incluso a los experimentados Warren, en donde por primera vez en la historia de Estados Unidos un sospechoso de asesinato aseguraba estar poseído por un demonio: "El diablo me obligó a hacerlo".
Una frase que ha sido usada para ambientar varias historias ficticias pero también reales que han sido llevadas a la pantalla grande por diferentes directores.
La posesión y el asesinato
En el caso de 'The Conjuring 3' ('El Conjuro 3'), en la vida real el hecho fue muy mediático debido a que en el juicio de Arne Cheyenne Johnson, también conocido como el caso ''El Diablo me obligó hacerlo'', el acusado aseguraba en su defensa que los actos cometidos fueron durante una posesión demoniaca.
En el relato ante la Justicia, la familia Glatzel asegura que su hijo David Glatzel, de 8 años, presuntamente fue el anfitrión del demonio que forzó a Johnson a matar a Alan Bono, luego de un exorcismo al menor en el que según los Warren el demonio salió del cuerpo del niño y poseyó a Johnson.
El abogado del joven argumentó que el crimen se debió a actos paranormales, pero el juez señaló que no se podía probar y era inviable ante la ley, por lo que el 24 de noviembre de 1981 fue condenado por homicidio en primer grado.