Una tormenta solar se acerca a la Tierra y podría afectar la red eléctrica del planeta
En esta oportunidad la tormenta solar podría ser menor, aunque llegaría a dar un golpe de refilón al campo magnético de nuestro planeta.
En esta oportunidad la tormenta solar podría ser menor, aunque llegaría a dar un golpe de refilón al campo magnético de nuestro planeta.
Este 10 de marzo, fue emitida una alerta ante la expulsión de una enorme bola de plasma del Sol que podría provocar una tormenta solar, que se encuentra en dirección al planeta Tierra en las próximas horas.
¿Cómo se produce este fenómeno? Una tormenta solar o eyección de masa coronal (CME) ocurre cuando el Sol expulsa una nube de partículas cargadas y fluctuaciones electromagnéticas. La CME fue liberada al espacio hace tres días por un "filamento" en erupción de campos magnéticos enredados en la superficie del Sol, que se dirige en este momento a la Tierra.
Sin embargo, el Centro de Predicción del Clima Espacial de Estados Unidos no ha emitido una advertencia frente a la tormenta. Aunque en esta oportunidad la tormenta solar es menor, podría dar un golpe de refilón al campo magnético de nuestro planeta.
Es importante conocer que las tormentas de este tipo son clasificadas según sea la escala: Una tormenta G1 tiene el potencial de tener impactos menores en la operación del satélite e inducir fluctuaciones débiles en la red eléctrica, mientras que una G5 puede afectar gravemente las operaciones de los satélites, generar sobretensiones que desconecten las redes eléctricas e interrumpir las comunicaciones de radio de alta frecuencia durante varios días.
Recordemos la eyección de masa coronal en septiembre de 1859, la cual provocó la tormenta geomagnética más poderosa registrada, a la que los científicos se refieren como el Evento Carrington. Esta afectó las redes de telégrafo en Europa y América del Norte, así como el enlace transatlántico recientemente tendido que las conectaba.
Según los informes, las corrientes generadas en los cables por el evento meteorológico espacial provocaron que algunas líneas fallaran por completo, las torres de telégrafo se encendieran y que los operadores recibieran descargas eléctricas.
Por fortuna, los astrofísicos predicen que existe una probabilidad mínima de 1.6% a 12% de que una tormenta solar sea lo suficientemente poderosa como para causar una interrupción catastrófica en la sociedad moderna y golpee la tierra en los próximos 10 años. Sin embargo, este fenómeno está bajo monitoreo especial