Las formas de calefacción más eficientes e innovadoras

Aquí te dejamos las formas de calefacción más eficientes para que ahorres energía y conserves el calor.

Bolivia.com - Vida Sana
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Aquí te dejamos las formas de calefacción más eficientes para que ahorres energía y conserves el calor.

Los tiempos invernales se avecinan, y todos queremos tener alguna estufa que nos acompañe a sobrellevarlo. Chimeneas, calefactores, aire acondicionado… cualquier artefacto nos viene bien para calefaccionar la casa, pero no todos son precisamente eco-friendly.

A medida que la tecnología avanza, existen cada vez más métodos de calefacción amigables con el planeta que no solo nos resguardan del frío, sino que también son más eficientes: ahorran energía y conservan mejor el calor.

Calefacción con Aerotermia

La aerotermia se trata de un mecanismo de aire acondicionado que utiliza bombas de calor, diseñadas para aportar calefacción en invierno, refrigeración en verano y, si se desea, agua caliente todo el año.  Este sistema une mecánica, química y electricidad para aprovechar la energía del aire exterior. Actualmente, muchos aires acondicionados ya usan esta tecnología, así que no es tan difícil de conseguir sistemas con estas características.

Ventajas: Puede suministrar calefacción por radiadores, aire o suelo radiante. Más del 65% del calor es generado gratis debido a que solo pagamos por el consumo eléctrico (dependiendo del equipo), lo que hace que al final de cuentas sea más barato que cualquier equipo a gas, gasoil, fuel-oil, pellets o propano. Es uno de los modos de calefacción para espacios cerrados más recomendados y eficientes en la actualidad.

Desventajas: Estos equipos suelen requerir una inversión inicial alta. Por ejemplo, un equipo para calefaccionar un departamento de 40 m2 gira en torno a los 2.000 dólares si incluimos el costo de instalación, aunque podemos encontrar más económicos.

Calefactores de pellets

Estufas innovadoras que ya están al alcance de todos. Utilizan como combustible los pellets, una fuente de origen natural derivada de la madera pero mucho más comprimida y densa. Ya no nos tenemos que preocupar porque los leños estén apagándose, porque es una estufa automatizada, que se autorregula la potencia y se apaga y enciende sola.

Ventajas: Los pellets son producto de desperdicios de talas, podas o carpinterías, tienen más poder calorífico que la propia leña y son más baratos que el gasoil. Además, prácticamente no produce humo y no es tóxico.

Desventajas: Este tipo de material debe usarse preferentemente en estufas especiales para ello. Esto conlleva una inversión inicial mayor que la de un aire acondicionado, y no son tan fáciles de encontrar.

Paneles de calor por infrarrojo

Este método calienta directamente a los objetos y las personas, en vez del aire, mediante radiación infrarroja. Suena algo amenazante, pero en realidad este tipo de radiación es perfectamente segura, pues es la misma que la que viene del sol pero sin los perjudiciales rayos UV. Cada equipo puede calentar desde 15 hasta 30 m2, e incluso se usa en algunas bases de la Antártida.

Ventajas: Este sistema genera un ambiente sin sequedad y sin circulación de polvo, lo que es perfecto para personas con problemas respiratorios o alergias. Además, los paneles son sumamente estéticos y adaptables hasta en exteriores. Al no contar con fuego ni gas, es imposible un riesgo de incendio.

Desventajas: En Bolivia son difíciles de conseguir, y requieren un alto costo de inversión inicial si lo queremos instalar en nuestra casa. Estos sistemas no incluyen la limpieza del aire y la ventilación como los sistemas de calefacción tradicionales, y además no sirven de nada en verano.

El calor del futuro: guardar el verano para el invierno

Imagina esto: el calor del verano se guarda para usarlo en invierno; cuando empiezan los días fríos agregas agua a un dispositivo, este emite el calor que fue almacenado allí hace meses y calienta tu casa. Además, puedes transportar ese calor a la casa que quieras como si llevaras el bolso de todos los días.

Suena como una película de ciencia ficción, pero es un verdadero proyecto encabezado por Benjamin Fumey junto a investigadores de los Laboratorios Federales Suizos de Ciencia y Tecnología de Materiales. Es una nueva tecnología que almacena el calor del verano para utilizarlo en invierno como calefacción, e incluso puede almacenarlo por años o transportarlo (aunque todavía no se sabe exactamente el tamaño de la célula de almacenamiento que tendrá el dispositivo pero se dice que podrá caber en un auto).

¿Cómo almacenan el calor? El sistema funciona capturando el calor solar en forma de energía química, lo que le da una vida útil más larga que los métodos tradicionales. Al tratarse de elementos y equipos comunes, su costo es bajo.
 
Aún se están buscando formas de adaptar este mecanismo a los hogares, y quizás demore un poco en llegar a este lado del mundo, pero lo que podemos afirmar es que todas las líneas de innovación en calefacción apuntan a aprovechar las energías limpias, con un gran ahorro energético en el mediano plazo y una mayor conciencia ecológica.

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