Lactancia materna llega al 40% de niños de 20 a 23 meses de edad
Un 40% de los infantes de 20 a 23 meses de edad en Bolivia aún son alimentados con lactancia materna, mientras que esa cifra sube a 60% si se considera a los pequeños de 0 a 5 meses.
Un 40% de los infantes de 20 a 23 meses de edad en Bolivia aún son alimentados con lactancia materna, mientras que esa cifra sube a 60% si se considera a los pequeños de 0 a 5 meses.
Los datos corresponden a un informe de UNICEF que reporta sobre el estado mundial de la infancia en cuanto a nutrición, violencia, educación, mortalidad y trabajo, entre otros aspectos. Los datos pretenden poner en evidencia de qué manera los niños y niñas reciben la nutrición que necesitan sus organismos y sus mentes para desarrollarse adecuadamente.
El informe "Todos los niños y niñas cuentan – Revelando disparidades para impulsar los derechos de la niñez 2014", publicado por UNICEF, muestra que se registra un 6% de menores con bajo peso al nacer en el país, según datos actualizados a 2012. El dato de la lactancia materna es importante porque ésta es la "alimentación perfecta" para las personas durante los primeros seis meses de sus vidas. "La práctica de la lactancia materna exclusiva proporciona mucho más que una fuente ideal de alimentación: los lactantes que solamente reciben leche materna tienen menos posibilidades de morir a causa de la diarrea, las infecciones agudas de las vías respiratorias y otras enfermedades; y además se ha descubierto que la lactancia materna exclusiva refuerza el sistema inmunológico de los lactantes y les protege contra enfermedades crónicas posteriormente en sus vidas, como la obesidad y la diabetes".
En el país un 64% de los niños recibe leche materna durante la primera hora de nacidos, y las madres incorporan alimentos sólidos, semisólidos o blandos en la dieta de los niños de 6 a 8 meses de edad. En el país se cuenta con un cuerpo legal y un programa de fomento a la lactancia materna, y la Ley 3460 determina que las instituciones públicas y privadas deben permitir la presencia de los pequeños durante sus primeros seis meses de vida en las fuentes de trabajo y/o estudio de sus madres para cumplir con su alimentación exclusiva.
La alimentación en la primera infancia tiene directa correspondencia con su desarrollo saludable a futuro. Por eso es importante el otro dato sobre la cortedad de talla que alcanza a un 27% en el caso de los niños de 0 a 59 meses de edad que están por debajo de la media de altura por edad del patrón internacional de crecimiento infantil.
La cobertura en vitamina A es de 41%, para enfrentar su rápido crecimiento y combatir infecciones, y la de consumo de sal yodada es de 89%, para asegurar un adecuado funcionamiento de sus capacidades cognitivas.
El estudio de Unicef plantea que los datos proporcionados y publicados pueden dar paso a un cambio para mejorar la situación de los niños en el mundo y en cada uno de los países. "Lo más importante es que los responsables de tomar decisiones utilicen los datos para lograr cambios positivos, y que los niños y las comunidades tengan acceso a ellos para pedir cuentas a los garantes de sus derechos", dice el informe.
Bolivia ocupa el puesto 60, de un total de 194 escalones, en la tasa de mortalidad de menores de 5 años de edad, un indicador considerado "fundamental para medir el bienestar de los niños". Esto significa que en el país mueren 41 pequeños por cada 1.000 nacidos vivos. La ubicación está lejos del primer lugar que ocupa Sierra Leona con 182 muertos por cada 1.000 nacidos vivos, pero también del otro extremo que es en Luxemburgo con 2 muertes por cada 1.000 nacidos vivos.
Fuente: PIEB