Los escenarios del fallo que espera Bolivia en La Haya
Bolivia le pide a la ONU que declare que Chile tiene la obligación de negociar un acuerdo para darle un acceso al Océano Pacífico.
Bolivia le pide a la ONU que declare que Chile tiene la obligación de negociar un acuerdo para darle un acceso al Océano Pacífico.
El fallo que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) dará a conocer el próximo 1 de octubre por el juicio entre Bolivia y Chile contempla todo tipo de escenarios, desde una aceptación total de los argumentos de uno de los Estados hasta fórmulas intermedias que contenten a ambos países.
"Es como en un juicio nacional, las partes pueden ganarlo o perderlo totalmente o parcialmente. Depende del caso", advirtió a Efe la profesora de Derecho Internacional de la Universidad de Concepción, Paulina Astroza.
Bolivia le ha pedido al alto tribunal de la ONU que declare que Chile tiene la obligación de negociar un acuerdo que le otorgue un acceso soberano al Océano Pacífico, el cual perdió en la Guerra del Pacífico, hace 139 años.
Los grandes escenarios del fallo que se manejan son tres
El primero, el más favorable para Chile, es que los jueces declaren que "no hay ninguna fuente del derecho internacional que funde esa supuesta obligación de negociar" que reclama Bolivia, explicó Astroza.
Eso significaría que la CIJ aceptaría de pleno la petición formal de Chile, que durante las vistas orales solicitó a los jueces que "desestimen todas las reclamaciones" de Bolivia.
El segundo escenario posible es que los magistrados consideren que Chile adquirió en el pasado la obligación de negociar, pero que esta ya la cumplió, "por ejemplo, en Charaña", indicó la experta.
El "Abrazo de Charaña" fue un acta conjunta que firmaron en 1975 los dictadores de Chile, Augusto Pinochet, y Bolivia, Hugo Banzer, en lo que se consideró un canje territorial, pero que según Chile naufragó porque Bolivia exigió nuevas condiciones.
Si la CIJ optara por esta segunda opción, "le daría la razón a Chile, porque diría que no hay nada pendiente con Bolivia", comentó Astroza.
La tercera posibilidad es que los jueces acepten todos los postulados de Bolivia y digan que Chile está jurídicamente obligada a sentarse a negociar con su vecino "de buena fe, sin demora, de manera formal" y "dentro de un plazo razonable", tal y como reclamó La Paz en las vistas orales de marzo.
La negociación "de buena fe" invocada por Bolivia es un principio general del Derecho que se ha definido de varias maneras.
"En el caso de una negociación se entiende como la ausencia de ánimo de una de las partes de engañar a la otra", comentó Astroza, o "la falta de deseo de llegar a un acuerdo, hacer como que se quiere llegar a él pero sin tener ese espíritu".
En un fallo anterior, el tribunal determinó que las partes no actúan de buena fe "si se sientan a negociar y ninguna de ellas tiene intención de ceder, porque negociar es ceder en alguna medida", explicó Astroza.
"Sería interesante ver el razonamiento de la CIJ para determinar cómo surgió esa obligación", indicó la experta, aunque advirtió de que, incluso en ese caso, dicha obligación sería de medio, no de resultado.
Es decir, el tribunal forzaría a Santiago a negociar, pero el eventual fruto de las conversaciones seguiría dependiendo de que las partes sean capaces de ponerse de acuerdo, por lo que en ningún caso Bolivia obtendría un acceso al Pacífico el 1 de octubre.
Además de esos tres grandes escenarios, Astroza no descarta un cuarto que sería interpretado como una solución intermedia.
La CIJ podría decir que, aunque Chile no tiene la obligación jurídica de negociar, recomienda a las partes que se sienten y entablen conversaciones para solucionar sus diferencias.
Ese llamamiento se fundaría "en algo que la propia Bolivia alegó en sus presentaciones, los principios del derecho internacional de las buenas relaciones, de la solución pacífica de controversias y de la invitación al diálogo", dijo la experta.
No obstante, esa solución sería "una invitación más política que jurídica, no un mandato", puntualizó.
Sea cual sea el resultado final, "las dos partes van a tratar de minimizar los efectos negativos de la sentencia y explotar al máximo los positivos", advirtió Astroza.
EFE