El sector Salud inició un paro de 48 horas, pidiendo al Gobierno que se escuchen sus peticiones

Este miércoles, 2 de junio, ha iniciado un paro de 48 horas del sector de la salud. Médicos y personal de la salud acatan esta medida para exigir al Gobierno que de atención al pliego petitorio que tienen con 15 puntos a tratar.

El Consejo Nacional de Salud (Conasa) ha ratificado esta medida, ya que hasta ahora no se ha obtenido respuesta del Ministerio de Salud. Se han enviado cartas para reanudar una mesa de diálogo, pero el ministro Jeyson Auza, nunca respondió, así lo denunció el secretario general del Colegio Médico de Bolivia y portavoz del Conasa, Freddy Fernández.

Fernández señaló que la dirigencia solicitaba dialogar con las autoridades respecto a los 15 puntos que presentan en su pliego petitorio, sin embargo, al no haber dado atención a las notas que se enviaron al Ministerio y a la "intransigencia de esta cartera de Estado para no reanudar el diálogo", es que se asumieron estas nuevas medidas.

 Los puntos que ellos demandan, contemplan las mejorías respecto a la condición de atención en hospitales, que es más importante ahora que se acerca una quinta ola del COVID-19. Otra de las peticiones es la abrogación de la Ley de Emergencia Sanitaria que, según indican, no se cumple.

También se manifiesta dentro de las peticiones, el pago de salarios de los profesionales que trabajaron durante la pandemia, la dotación de ítems a nivel nacional, la institucionalización de los cargos, estabilidad de la seguridad social, el funcionamiento del hospital de Montero, entre otras demandas que tiene el sector de la salud.

“¿De qué nos sirve una Ley de Emergencia, cuando no tenemos los insumos y los recursos humanos necesarios, cuando no se ha tomado en cuenta el crecimiento vegetativo para dotar de ítems a cada departamento?”, cuestionó el presidente del Colegio Médico Departamental, Wilfredo Anzoátegui.

El presidente del Colegio Médico también lamentó que hasta ahora las condiciones laborales son desfavorables para los profesionales de la salud que llegan a tener sueldos de hasta Bs. 1.500, sin estabilidad laboral.

Por su parte, la respuesta que dio el ministro de Salud, fue calificar la medida como una forma de desestabilizar al sistema de salud y que niniciará el diálogo únicamente con "médicos y personal de salud que realmente le interesa la salud y la vida del pueblo boliviano".

Auza re refirió también al director del Colegio Médico de Bolivia, Luis Larrea, diciendo que debe dejar de "politizar la salud" porque no se le va a permitir "que se atente contra la vida de la población".