Estas son algunas señales de alerta para identificar signos de abuso sexual y qué hacer al respecto

Hoy en día, el abuso sexual infantil está cada vez más latente en nuestra sociedad, y lamentablemente, muchos de sus agresores, en su mayoría, terminan siendo familiares o personas muy cercanas al entorno.

Incluso, en los últimos días, se conocieron casos de menores que fueron víctimas de violaciones crueles y abusos sexuales en el país.

Por estas razones, es importante conocer las señales de alerta, qué hacer en estos casos y a quién recurrir para solicitar ayuda en situaciones lamentables como estas.

Primero, es bueno recordar que el abuso sexual infantil es todo acto sexual que involucra a un adulto con un menor, sea niño o adolescente. Sin embargo, en muchas ocasiones estas actividades pueden presentarse de manera sutil o inocentemente.

¿Cuáles son los signos de alerta?

Según especialistas, en la mayoría de los casos, cuando un niño está siendo abusados sexualmente tiende a retirarse o aislarse por vergüenza. Incluso, el miedo o el rechazo a personas específicas, sería un punto clave para empezar a sospechar que algo no está bien.

Los cambios de conductas insuales para escapar al trauma, ya que al ser víctima de abuso el menor puede desarrollar un trauma y expresarlo a través del aislamiento, la irritabilidad, el llanto, e incluso depresión y ansiedad.

Otro signo de alerta son las preguntas inusuales sobre temas de sexualidad que no corresponden a su edad, así como también juegos o dibujos inapropiados que el menor pueda realizar. Los problemas con su rendimiento escolar o la pérdida de interés en actividades que solía hacer podrían alertarte.

La dificultad para dormir es otro indicador. Incluso, la disrupción del sueño o la regresión en algunas conductas, es decir volver a realizar conductas de etapas evolutivas anteriores que ya parecían superadas, como por ejemplo mojar la cama, son algunas señales que podrían refelejar abuso sexual.

Expertos aseguran que la violación es solo uno de los tipos de abuso existentes; sin embargo, enseñar pornografía a un menor, estimularlo mediante palabra o exhibición, fotografiarlo desnudo con intenciones sexuales o mantener relaciones sexuales delante suyo también son tipos de abuso.

¿Qué hacer en estos casos?

Primero es importante entender que en muchos de estos casos los abusadores buscan la forma de que su víctima no hable, ya sea con sobornos o amenazas. 

Por lo tanto, lo inicial que recomiendan los especialistas es abrir una comunicación con el niño, siempre mostrando confianza y sobre todo credibilidad.

Segundo, no dudes en reportar el abuso ante las autoridades pertinentes tan pronto como sea posible.

Lo siguiente es realizarle un examen médico, con el fin de prever que no exista lesión física, daño o enfermedad producto del abuso cometido. Además sirve como evidencia para el caso.

Otra cosa importante es buscar ayuda de un psicólogo, pediatra, consejero o trabajador del servicio de protección infantil. 

Por último, procure no enfrentar al niño con el agresor, podría generar traumas mayores y estrés en el menor.

¿Quién me puede ayudar?

Una vez los padres del menor tienen conocimiento de la agresión sexual, la instancia donde deben recurrir es la Defensoría de la Niñez y Adolescencia, allí les proporcionarán asistencia psicológica y apoyo en la declaración para inmediatamente formalizar una denuncia ante la Fiscalía.

Además la Defensoría realizará los respectivos análisis médico forenses, informes preliminares psicosociales y tomar la declaración para iniciar el proceso.