Se conocen las primeras alianzas políticas de cara a los comicios de mayo

Libre 21, Creemos, Juntos, Comunidad Ciudadana y Pueblo Unido son las cinco alianzas políticas que hasta la media noche del viernes oficializaron su registro ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE) para participar en los comicios generales pautados para el 3 de mayo.

La primera alianza que se inscribió fue "Libre 21" compuesta por el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) y el Movimiento Por la Soberanía (MPS).

Esa alianza postula a la presidencia a Jorge Quiroga.

Luego se presentó "Creemos" que unifica al Partido Demócrata Cristiano (PDC), Unidad Cívica Solidaridad (UCS) y la agrupación ciudadana "Camino Democrático para el Cambio", cuyos candidatos son Luis Fernando Camacho y Marco Antonio Pumari.

Más adelante formalizó su registro la alianza "Juntos" formada por Demócratas, Soberanía y Libertad (Sol.bo), la agrupación ciudadana "Todos" y la agrupación política Unidos Para Renovar (Unir), que postulan a la presidencia a la mandataria Jeanine Áñez.

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Comunidad Ciudadana (CC) fue otra de las coaliciones que registró su participación en la institución electoral, que aglutina a las agrupaciones ciudadanas "Jesús Lara" y "Chuquisaca Somos Todos" y al Frente Revolucionario de Izquierda (FRI).

CC ratificó a Carlos Mesa como candidato a presidente.

La quinta alianza fue "Pueblo Unido" formada por el Partido Demócrata Cristiano (PDC) y el Movimiento Ciudadana San Felipe de Austria (MCSFA).

Con el registro de las alianzas políticas se cumplió una de las actividades del Calendario Electoral aprobado para los nuevos comicios de mayo.

Ayer, el presidente del TSE, Salvador Romero, informó que la documentación presentada por las alianzas será revisada hasta el martes, para que las observaciones que puedan existir sean subsanadas en las siguientes 72 horas.

Más de 7 millones de bolivianos acudirán nuevamente a las urnas en mayo para elegir presidente, vicepresidente y asambleístas, tras las fallidas elecciones del 20 de octubre del pasado año, cuando se verificó un fraude electoral urdido por el Movimiento Al Socialismo (MAS) con el afán de perpetuarse en el poder.