Liga Boliviana

Abren primera escuela de fútbol para niñas y mujeres en Bolivia

El "Club Deportivo Mayas Fem", es el nombre de la escuela de fútbol para mujeres en El Alto. 

Actualización
La escuela formadora trabaja con 15 niñas y unas 50 adolescentes que aman el fútbol. Foto: EFE
La escuela formadora trabaja con 15 niñas y unas 50 adolescentes que aman el fútbol. Foto: EFE

El "Club Deportivo Mayas Fem", es el nombre de la escuela de fútbol para mujeres en El Alto. 

Abrió la primera escuela de fútbol de mujeres en El Alto, se trata del "Club Deportivo Mayas Fem". El proyecto nació de siete mujeres que evaluaron las dificultades para el fútbol femenino en el país. 

Las mujeres tuvieron la iniciativa vivir en carne propia la falta de apoyo en casa o la exclusión en las escuelas de fútbol de predominio masculino, contó Caterine Choque, una de las entrenadoras fundadoras de este proyecto. 

"Viendo también nuestras carencias cuando éramos más jóvenes, que no podíamos acceder a una escuela de fútbol, dijimos creemos una escuela netamente femenina, de mujeres para mujeres. Ese es el lema que manejamos desde entonces", contó Mery Apaza, otra de las entrenadoras. 

Así fue como en 2017 las flamantes entrenadoras abrieron la escuela hoy conocida como 'Club Deportivo Mayas Fem' con las especialidades de fútbol y fútbol sala.

La escuela lleva ese nombre porque 'maya' es el número uno en aimara, y la suya fue la primera escuela de fútbol solo para mujeres en El Alto, donde ya había otros centros de formación para hombres o mixtos. La escuela quedó con tres entrenadoras, Choque, Apaza y Pamela Zanga, y actualmente funciona en la cancha de la zona alteña de la Extranca de Río Seco.

Choque y Apaza confesaron que no fue fácil echar adelante su iniciativa, ya que se toparon con muchas trabas por ser mujeres para, por ejemplo, conseguir espacios donde entrenar.

Según Choque, los administradores de los campos deportivos les ponían peros y excusas para cederles los espacios o privilegiaban a las juntas de vecinos o los sindicatos de transportistas.

"Entonces no teníamos ese apoyo (...) Hasta el momento nos falta todavía cambiar esa forma (de pensar), pero estamos ahí aguantando", indicó.

La escuela trabaja actualmente con 15 niñas y unas 50 adolescentes y mujeres desde los 13 años en adelante, ya que una de sus premisas es no limitar la edad de las participantes. Y son bienvenidas todas: las estudiantes, las amas de casa, las madres, que algunas acuden a los entrenamientos con sus hijos pequeños, resaltó Choque.