Conoce a la familia Loyza, los bolivianos que viven con hadas y duendes

Patricia Loayza asegura que su casa está llena de duendes y hadas; puso cámaras de seguridad en algunos puntos y ha logrado captar "seres paranormales" que la visitan. La mujer reveló todo ante el Programa Al Rojo Vivo de Telemundo. 

"Nosotros los humanos hemos empezado a construir en sus bosques y los hemos invadido. Por eso andan por allí", decía Patricia ante las cámaras sin ningún temor. 

El periodista detalla que quizás el lugar de la vivienda de los Loayza sí era un bosque en La Paz y que las construcciones en la zona; llegaron para invadir su espacio natural y elemental. Aunque no detallan registros geográficos de cuál era la función previa de la zona de la vivienda de los Loayza. 

La familia no les tiene miedo y al contrario han comenzado a atenderlos brindándoles pepas de zapallo, agua, miel, chocolate e incluso tienen un jardín especial con las flores que "más les gustan a ellos". 

La situación de los Loayza captó la atención de una investigadora paranormal, Tatiana Vicuña, quien confirmó que captó la energía de los elementales con varias pruebas sensoriales. 

"Acá las luces suelen ser automáticas; ellos se comunican a través de la energía y el mensaje es claro ¡aquí estamos!", precisó Vicuña en conversación con Telemundo. 

Para los Loayza es un símbolo de respeto, un mensaje de que deben cuidar más la Madre Tierra; por eso mantienen unas figuritas, donde los personifican y no se asustan cuando ven o escuchan algún tipo de aleteo o "pasitos" cerca. 

Recordaron que estos seres elementales no son para pedirles dinero, salud y mucho menos suerte; al contrario, son para recibirlos con amor, para que cuiden de sus plantas y bendigan el hogar de la familia con su presencia.

En Bolivia, las familias que adquieren los muñecos (duendes) los botan cuando ven que no llega "la suerte que pidieron". Por esta razón, sí sienten que se pierden las cosas en casa, deles la bienvenida y no se asusten.